Juanma Romero

Madrid

Izquierda Unida vuelve a la crisis. Sin paños calientes, como ya nadie dentro de la federación oculta. Y a menos de tres meses de unas elecciones generales decisivas.

La resolución que la Presidencia Federal de IU votó ayer, por 30 votos a favor y uno en contra, era el síntoma palpable de la confrontación latente. El documento centraba su atención en la convocatoria de unas primarias en Valencia amarradas desde la dirección federal. Un punto básico. Pero acababa con el apartamiento de las funciones ejecutivas en el seno de la Comisión Permanente de tres líderes del Partido Comunista (PCE), muy críticos con la doctrina política del actual coordinador, Gaspar Llamazares: Felipe Alcaraz, Willy Meyer y Manuel Monereo.

La Presidencia justificó el cese por la “situación de excepcionalidad electoral en el trabajo de IU y para mejorar su capacidad de dirección colectiva y coherente con la línea aprobada” en las primarias del 14 de noviembre. La reestructuración de la Permanente, órgano ejecutivo pero no decisorio, lleva aparejada la entrada de Antonio Cortés, ahora responsable adjunto de Organización y Censos, y de Carlos Guirbau, coordinador de Foros Sociales. También engorda sus competencias Presentación Urán, ex diputada en el Congreso y, desde ayer, responsable adjunta a la Coordinación de Áreas y Programa.

En el federal apuntan al “detonante” de los ceses,: la “cerrazón” de la dirección valenciana a abrir un proceso de primarias para elegir a sus candidatos al Congreso. Durante todo el lunes se había larvado un “principio de acuerdo” entre los negociadores de Llamazares –Manuel Cámara, Ramón Luque y Joan Josep Nuet– y los interlocutores del PCE –Ricardo Sixto, Paco García Mancheño y Fernando Sánchez– para pactar una consulta a los militantes entre los aspirantes a la Cámara baja (por Valencia, Antonio Montalbán, de parte de los comunistas, e Isaura Navarro, promovida por el federal).

Pero ayer la coordinadora regional, Glòria Marcos, arropada por el PCE, rompió ese precarísimo acuerdo. Pacto que, según relató horas después a Público, “nunca existió”. “Jamás consentiremos traspasar la legalidad en Esquerra Unida [EUPV]. El federal ha cruzado el Rubicón. Ésta es la ruptura, el principio del fin”. Con el entendimiento hecho trizas, es finalmente la Presidencia quien convoca las primarias en Valencia, lo que a la postre aboca a la presentación de dos listas en marzo. Una, avalada por la dirección regional. La otra, por el federal.

El PCE, a los tribunales

“Si EUPV hubiese aceptado preguntar a las bases… Sí, no se habría quizá incluido el cese de Alcaraz, Meyer y Monereo”, argumentan los más próximos al líder de IU. “Pero no es una represalia, es un ajuste que había que hacer. No podíamos mantener en sus puestos, antes de unas generales, a quienes obstaculizan el trabajo de la dirección. Utilizaban sus cargos para meter caña a Gaspar o no hacían nada como responsables de área. Aunque, ojo, no se van de aquí”. En efecto, los tres críticos se despiden de la Permanente, no de la Presidencia ni del Consejo Político Federal (CPF), los únicos estamentos decisorios en IU.

El PCE quemará “todos” sus cartuchos a partir de ahora. Irá a los tribunales. Intentará forzar la celebración de un CPF extraordinario y “dar una respuesta unitaria al golpe de mano de Gaspar”. Ayer ya reunió 19 firmas, las de todos los que salieron de la reunión de la Presidencia antes de la votación.

“Estamos mal, no voy a ocultarlo”, comentaba ayer a Público Ramón Luque, coordinador de la campaña. “Hemos llegado al choque de trenes”. IU está ahora en una ratonera, asume un dirigente de la federación. “Lo peor es que se ha creado un escenario de crispación que nadie sabrá cómo controlar”.

CLAVES

1.       LOS ÓRGANOS

El poder en IU se canaliza a través de tres órganos: el Consejo Político Federal, formado por casi 200 miembros; la Presidencia, de más de 70, y la Permanente, de 38. De los tres, ésta última es un estamento sin capacidad ejecutiva. Gestiona los asuntos del día y se conforma como núcleo de confianza del coordinador.

2.       ANDALUCÍA, A REVISIÓN

Vistas las “insuficiencias” de los censos que remitió Andalucía, la Presidencia decidió ayer la creación de una Comisión mixta de Censo, integrada por cuatro personas del federal y cuatro de la dirección andaluza (dos, del PCE y dos críticos).

3.       ISAURA NAVARRO, VIRTUAL CANDIDATA

Bloqueado el diálogo, y con el dictamen de la Comisión de Garantías en la mano –que avala los argumentos de la dirección federal pero no tumba la asamblea valenciana–, Madrid convoca las primarias. EUPV no participará, lo que coloca a la actual diputada en el Congreso, Isaura Navarro, como virtual candidata.

PERFILES

Felipe Alcaraz (Sevilla, 1943)

Es la cabeza más incómoda para Llamazares. Presidente ejecutivo del PCE desde 2005 y ex diputado en el Congreso, había mostrado a las claras su oposición al coordinador. La Presidencia le mantuvo en la Permanente como vocal raso, pero dimitió al minuto. “Esto la voladura de IU, una bomba política”, recalcaba ayer.

Willy Meyer (Madrid, 1952)

Hasta ayer, Meyer, uno de los históricos del PCE, era responsable de Internacional de IU. Sin acta en el Congreso desde 2000, ganó el escaño de eurodiputado en 2004. En las primarias apoyó a Marga Sanz, como Alcaraz y Monereo, por su enfrentamiento con la línea del federal.

Manuel Monereo (Jaén, 1950)

“[Paco] Frutos me expulsó de la Permanente del PCE en 2000 porque apoyé a Llamazares, y ahora es él el que me echa”, ironizaba ayer Monereo. Integrado en la dirección de los comunistas desde 1988 hasta 2005, se incorporó a la Permanente de IU en 2004 como hombre de consenso. Pero en los últimos tres años ha azuzado agriamente a Llamazares por su “subalternidad al PSOE” y su “autoritarismo” en IU.