Más de un tercio de la población de Gaza se encuentra hoy sin luz y sin pan, después de que la principal planta de electricidad de la franja suspendiera sus actividades por falta de combustible industrial, debido al bloqueo israelí. La única planta de Gaza, que provee de electricidad a más de medio millón de habitantes del norte y centro de la franja, permanece inactiva por segundo día consecutivo.

En la tarde del sábado las turbinas de la central tuvieron que suspender su actividad por la falta de fuel que entra desde el territorio israelí. 'Israel no permitió la entrada del combustible pese a que había prometido que se reanudaría este domingo', declaró a la prensa Kanan Obied, responsable en Gaza de la Autoridad Palestina de Energía.

El jefe del departamento de relaciones públicas de la planta, Jamal Al Derdisawi, manifestó por su parte que Gaza sufre una crisis de electricidad, y agregó que, cuando la planta cerró, 'la escasez de energía afectaba al 35 por ciento de la población'.

El último cargamento de fuel entró el pasado miércoles, cuando las autoridades israelíes aislaron Cisjordania y Gaza por los actos conmemorativos del 60 aniversario de la fundación del Estado de Israel. Entonces, se prohibió la entrada o salida de personas y productos de los territorios ocupados hasta el anochecer de ayer, sábado.

El paso industrial fronterizo de Nahal Oz, por donde entraba regularmente el combustible a la franja mediterránea, permaneció cerrado durante la jornada del sábado y hoy domingo.

A esta situación se ha venido a sumar hoy el anuncio hecho por un grupo de panaderos de la ciudad de Gaza ante los medios de comunicación de que, debido a la falta de electricidad, también ellos se veían obligados a paralizar su actividad.

Israel, que mantiene un férreo bloqueo a la franja desde que el movimiento islamista Hamás tomara por las armas ese territorio en junio de 2007, ha estrechado el cerco por los constantes ataques con cohetes y proyectiles de mortero desde Gaza contra su territorio.

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, que una vez más hizo hoy a Hamás 'completamente responsable' de la situación que vive Gaza, prometió tomar 'duras medidas' para impedir que las milicias continúen atacando a Israel.

El jefe del Ejecutivo, que en septiembre de 2007 declaró a la franja 'entidad enemiga', hizo estas advertencias en la reunión semanal del Consejo de Ministros celebrada en Jerusalén, dos días después de que un ciudadano israelí perdiera la vida a consecuencia del impacto de un proyectil de mortero en una cooperativa rural aledaña a Gaza.

'Si no hay calma, Israel tomará duras acciones que reportarán la calma', amenazó Olmert al comienzo de la reunión.