El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, lanzó ayer un duro alegato contra el mercado laboral español y destacó la urgencia de reformar su estructura si se quiere que la economía española salga de la crisis en condiciones razonables de crecimiento. Ordóñez defendió esta tesis en la conferencia inaugural de las IV Jornadas sobre la Singularidad de las Cajas de Ahorros Españolas, que se celebran en Zaragoza.

En su intervención, el gobernador constató que España ostenta el “lamentable récord” de ser el país de la OCDE con mayor tasa de paro, y también uno de los que ha empeorado con mayor rapidez. Ordóñez lo achaca a un sistema “ineficiente”, en especial en lo que se refiere a la indemnización al despido, que a su juicio desincentiva la movilidad laboral y la contratación y en última instancia determina “un rotundo fracaso” en el objetivo de reducir el desempleo. En su opinión, sin embargo, centrar el debate exclusivamente en el abaratamiento del despido, como proponen las empresas, “sería un error”.

El gobernador reconoce que la reforma del mercado laboral es una de las reclamaciones tradicionales del Banco de España. Pero ahora la situación ha cambiado. “Lo nuevo es que esta reforma se ha vuelto absolutamente imprescindible” porque de lo contrario “estaremos abocados a crecer muy por debajo de lo que lo hemos hecho en las últimas décadas”, dijo.
El máximo responsable del Banco de España aludió también a otras reformas estructurales “muy necesarias”, como las
del mercado de alquiler de viviendas, el impulso de la competencia en los servicios, el transporte ferroviario de mercancías, la energía o de la Administración Pública.

Por otra parte, Fernández Ordóñez, no descartó la posibilidad de que sea necesario intervenir en las cajas de ahorros o en alguna entidad financiera, a la vista de la intensidad de la crisis, pero recalcó que el sistema financiero español es “muy sólido”. Además, defendió que los bancos tengan unos beneficios saneados, porque esa es la primera línea de defensa contra la crisis y es bueno para depositantes y usuarios. El gobernador también se pronunció sobre la política monetaria europea y consideró “muy probable” que el Banco Central Europeo, del que él forma parte, rebaje los tipos de interés en su reunión del mes de marzo.

“¿Qué ganamos con negarnos a aprender de los demás en todo aquello que pueda reducir la tasa de paro?” Con esta pregunta, el gobernador del Banco de España enfatiza la necesidad de mirar alrededor para ver qué modelos de mercado laboral están funcionando en el mundo. Y apunta dos ejemplos muy concretos: Austria y Dinamarca. El sistema austriaco se basa en la constitución por parte de las empresas de un fondo para cada uno de sus trabajadores, de tal forma que si pierden el empleo puedan complementar la ayuda del Estado con una aportación adicional. Además, cuando el trabajador se cambia de empresa, se lleva consigo la parte no consumida de su fondo individual, lo cual facilita la movilidad laboral. El caso danés es más simple. En su sistema laboral, prácticamente ha desaparecido la indemnización por despido, pero se ha reforzado la prestación en caso de paro. La tasa de desempleo de ambos países ronda el 4%.