Público
Público

La ministra de Interior de Brown dejará el Gobierno

Jacqui Smith ha sido muy criticada al saberse que su marido utilizó parte de sus dietas parlamentarias para adquirir dos películas pornográficas

LOURDES GÓMEZ

Las grietas en el Gobierno británico se agrandaron ayer con el anuncio de la inminente renuncia de la ministra del Interior y otros dos altos cargos del equipo de Gordon Brown. Jacqui Smith saldrá del Ejecutivo laborista en el reajuste del Gobierno que el primer ministro se dispone a efectuar en los próximos días.

La responsable del Home Office se vio salpicada por el escándalo de los gastos de los parlamentarios, que agravó la situación creada por su discutida gestión ministerial. Su salida del Gobierno se daba por descontada. Según trascendió ayer a los medios de comunicación, Brown conocía desde hace dos meses la intención de Smith de abandonar el buque insignia laborista.

La renuncia de la ministra, filtrada ayer a la prensa, desvía la presión sobre el número dos de Brown, el responsable del Tesoro. Alistair Darling también está enredado en la saga de los gastos y la oposición pide su cabeza desde hace días. El futuro de Darling está en el aire, pero con la atención centrada ahora en Smith, Brown gana un poco de tiempo para ajustar las piezas de su próximo equipo de Gobierno.

Se espera la remodelación para esta misma semana. Según coinciden los sondeos, los laboristas se dirigen al descalabro en las elecciones europeas y municipales, que se celebran en el Reino Unido el jueves. Pero el primer ministro se resiste a tirar la toalla y sus colegas de gabinete no parecen, de momento, decididos a empujarle hasta el precipicio.

Un reajuste del gabinete permitirá a Brown alargar la agonía de su liderazgo unos meses más, con la esperanza de que las crisis económica y política amainen antes de convocar elecciones generales en la primavera de 2010.

Otros dos cargos ministeriales Tom Watson, de la Oficina del Gabinete, y Beverley Hu-ghes, secretaria de Estado para las Familias comunicaron que tampoco formarán parte del nuevo equipo de Brown. Ante la acumulación de bajas filtradas en un solo día, los conservadores denunciaron la pérdida de control del primer ministro. William Hague, portavoz de Exteriores tory, describió el Gobierno como 'una hilera de cadáveres políticos'.

Smith ya estaba en dificultades antes de que el diario The Telegraph comenzara a publicar los abusos de gastos de los parlamentarios en mayo. Un vecino denunció a la ministra del Interior que, aunque comparte su domicilio londinense con su hermana, registró la casa como su primera morada.

El marido e hijos de Smith viven en una vivienda en su distrito electoral, cuyos gastos corren a cuenta del contribuyente. Smith incluso presentó facturas por dos vídeos porno que había alquilado su marido. Ya ha devuelto al fisco los 12 euros cobrados por las películas, pero la humillación aún persiste.

Las irregularidades con los gastos fueron la puntilla a dos años de constantes patinazos de Smith al frente del Home Office.

La ministra insistió en extender hasta 42 días el plazo de detención de sospechosos de terrorismo hasta que la Cámara de los Lores tumbó la enmienda legislativa. También perdió un pulso con el alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, sobre el control de la Policía Metropolitana de la capital.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional