El suelo, cero. El techo, 10.142, el total de iniciativas parlamentarias entre preguntas orales y escritas y peticiones de informes presentadas por un solo diputado en esta IX Legislatura. Es Miguel Ángel Cortés. Claro que este parlamentario del PP por Valladolid echa mano de un truco extendido: presentar cientos de preguntas a la vez que en realidad son una sola –por ejemplo, la ejecución presupuestaria en cada uno de los municipios de una provincia–, pero que, a efectos de registro, sirve para engordar las estadísticas. A Cortés le siguen Celia Villalobos (6.230) y Rafael Merino (5.923).

Entre los socialistas, Miguel Ángel Heredia, diputado por Málaga, se lleva la palma: 1.144 iniciativas. A distancia, le sucede Carlos González, con 363, o Domingo Miguel Tabuyo, con 361 y Carmen Juanes (273). De los 29 electos de los grupos minoritarios, cuatro superan el millar de preguntas e informes solicitados: Carlos Salvador, de UPN (2.212), los convergentes Pere Macias (1.653) y Carles Campuzano (1.041) y Gaspar Llamazares, portavoz de IU (1.485). A todos habría que sumarles las múltiples intervenciones en pleno y comisión.

'Hay que dedicarle muchas horas a esto, ser selectivo, centrarte en los temas que tienen más relevancia para tu partido y apoyarte en la estructura de apoyo del grupo, que en el caso de los minoritarios es pequeña', receta Francisco Jorquera. El portavoz del BNG, igual que Emilio Olabarria (PNV), Macias o Llamazares, confiesan haberse sentido 'desbordados' por la carga de trabajo de una legislatura casi monotemática, en la que 'todos los grupos, también los grandes, han tenido que aprender mucho y muy rápido de economía', añade el republicano Joan Ridao.

'Tienes la sensación de que te debes multiplicar por muchos, porque los pequeños intervenimos en todos los debates de la Cámara', aduce Olbarria. ERC-IU-ICV debía sortear otro escollo: coordinar el trabajo de un grupo inédito hasta 2008, y producto de los malos resultados electorales de las tres fuerzas. Ridao y Llamazares elogian la 'diligencia' de sus diputados, la escasez de 'tensiones' y la práctica 'comunión de intereses' alcanzada, lo que evitaba duplicar esfuerzos, objetivo clave cuando las manos no sobran.

Para Mamen Sánchez, esta ha sido su tercera legislatura, la segunda en la dirección del Grupo Socialista. 'Y ha sido de las mejores, sobre todo por cómo ha trabajado la gente. No pongo pegas'.

José Luis Ayllón, número dos en el PP, 'no hay diputados de primera o segunda'. 'Con los temas polémicos, cada uno actúa a su manera. Y unos hacen miles de preguntas, estén en el Gobierno o en la oposición'. La barrera la pone cada escaño.

-Diputados 0,0: cerca de 30 parlamentarios no han presentado ninguna pregunta ni pedido informes al Gobierno en la legislatura que se cerró el pasado martes