El jueves al medio día se registraron cuatro incendios en el Pirineo de Lleida, que han acabado con 1.000 hectáreas de masa forestal. También obligaron a desalojar a más de cien personas.

De los cuatro fuegos, tres todavía continúan activos y sin control, mientras que el que afecta al término municipal de Montanissell, en el Alt Urgell, se encuentra en fase de control desde las 18:00 de la tarde de ayer.

Hoy se han registrado vientos más débiles por lo que se han sumado a las tareas de extinción los medios aéreos, gracias a ellos se espera controlar el resto de incendios a lo largo del día de esta jornada.

El conseller de Interior, Felip Puig, confía en que los Bomberos puedan controlar hoy dos de los tres incendios que siguen activos en el Pirineo de Lleida, aprovechando que los medios aéreos se han sumado a las tareas de extinción al mermar las rachas de viento. 

El Cuerpo de Agentes Rurales ha abierto una investigación para determinar el origen de los diferentes fuegos. Todo apunta a que la combinación de fuertes rachas de viento, la sequía y la caída de unas instalaciones eléctricas pudieron causarlos.

Ayer el viento llegó a superar los 100 kilómetros por hora y estos podrían haber causado que varios cables eléctricos, según han apuntado los Agentes Rurales. A esta circunstancia se une la grave sequía que sufre este territorio, donde no se han registrado lluvias desde hace tres meses.

Todavía no descartan la opción de que el viento haya podido reavivar unas quemas realizadas en días anteriores que se dieron por extinguidas, según ha informado el director general de Prevención y Extinción de Incendios de la Generalitat, Jordi Gassió.

Los incendios se originaron en apenas una hora y media, entre las 12:30 y las 14:00 horas, en las comarcas de la Alta Ribagorça, el Pallars Sobirà y el Alt Urgell.

Las mismas causas rodean al incendio que se ha producido en el Pirineo de Huesca. Para conseguir paliar los efectos del fuego se han desplazado a la zona 210 soldados de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

El Batallón 4 de Zaragoza del UME está trabajando desde anoche. El UME ha asegurado que en el caso de que en las próximas horas se precise más ayuda se desplazará más personal del Batallón 3 de Valencia. Se ha puesto a disposición del Gobierno de Aragón doce vehículos autobomba y cuatro vehículos nodriza.

También se ha recurrido a los medios aéreos, por lo que un helicóptero Cougar, especializado en transportar y lanzar agua sobre las llamas y un EC-135, más ligero para situaciones de emergencia, trabajan para estabilizar este incendio.