Mohamed Merah ha muerto después de la intervención de las fuerzas de intervención rápida de la Policía francesa (RAID) tras 32 horas de asedio a su apartamento del número 17 de la calle Sergent Vigné de Toulouse. El joven, francés de origen argelino, 24 años de edad, confesó ayer haber llevado a cabo los ataques que acabaron con la vida de un profesor y tres niños en un colegio judío el pasado lunes, así como tres militares la semana pasada en Montauban.

Merah, que el día anterior se había definido como un muyahidín de Al Qaeda, dejó de mantener contacto con los negociadores a las 22.45 horas del miércoles. En torno a las 10.10 horas de este jueves los agentes del RAID (así te lo hemos narrado en directo), se decidieron a penetrar en su domicilio para comprobar si se encontraba con vida.

Una hora después, sobre las 11.30 horas se desató un intenso tiroteo de cinco minutos (se dispararon 300 balas) que finalizó con el sospechoso muerto y dos policías heridos. En un primer momento el ministro del Interior, Claude Guéant, afirmó que Merah se escondía en el cuarto de baño y tras enfrentarse a los agentes, saltó por el balcón. Luego el Fiscal del Estado francés, François Molins, precisó que Merah murió de un tiro en la cabeza antes de caer por la terraza. 

En una rueda de prensa en Toulouse, Molins insistió que los agentes del RAID tenían la consigna de hacer todo lo posible para capturarle vivo y que actuaron 'en legítima defensa' cuando el sospechoso saltó por la ventana del apartamento disparando contra ellos.

Molins detalló que el joven, un francés de origen argelino de 23 años de edad que dijo actuar en solitario pero en nombre de la organización terrorista Al Qaeda, había grabado con una cámara colgada al cuello los crímenes que se le atribuyen, cuyas imágenes fueron visionadas anoche por la policía.

'Si muero yo, peor para mí, pero voy al paraíso. Si sois vosotros, peor para vosotros', advirtió Merah a los negociadores

En ellas se puede ver cómo en el primer asesinato, el de un militar del regimiento de paracaidistas ocurrido en Toulouse el pasado 11 de marzo, le dijo a su víctima: 'Tú matas a mis hermanos, yo te mato a ti'. La misma sangre fría mostró, según se desprende de esa grabación, en el asesinato de otros dos militares en Montauban cuatro días más tarde, y en la de tres niños y un adulto, padre de dos de ellos, en una escuela judía de Toulouse este lunes. 

Durante las 32 horas que duró el cerco se atravesaron tres fases, según el fiscal: tras los disparos con los que recibió a los agentes de madrugada, que provocaron dos heridos, se entabló una negociación en la que el sospechoso proclamó en dos ocasiones su voluntad de entregarse.

'A partir de las 22:45 cambió radicalmente de actitud', indicó en esa rueda de prensa, en la que explicó que el asesino dijo entonces haber reflexionado y querer 'morir con las armas en las manos'. 'Si muero yo, peor para mí, pero voy al paraíso. Si sois vosotros, peor para vosotros', advirtió a los negociadores, que durante toda la noche optaron por una estrategia de desgaste mental del sospechoso, con detonaciones regulares con las que se logró romper la puerta de entrada.

Cuando los agentes iniciaron el asalto, a las 09:30 GMT de hoy, 'salió brutalmente del cuarto de baño armado, disparó contra los agentes y avanzó saltando por el balcón', recordó Molins, indicando que disparó contra los miembros del RAID.

La operación continúa ahora con el análisis de las conversaciones mantenidas con los negociadores, de las imágenes que grabó con su cámara, de las que no hay constancia que hayan sido colgadas en Internet, y con el interrogatorio a los detenidos, entre quienes se encuentra su hermano Abdelkader, conocido también por sus vínculos salafistas, y que tenía explosivos en el coche.

La comparecencia del fiscal se produjo tras la del presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, quien desde París anunció una reforma legislativa para imponer penas a quienes consulten páginas de internet que hagan apología del terrorismo o la violencia o a quienes viajen al extranjero para adoctrinarse en ese tipo de ideologías. 

El candidato a la presidencia por el Partido Socialista, François Hollande, intervinó acto de la campaña electoral, que se reaunudó este jueves después de tres días de parón. Para el socialista, 'lo sucedido nos recuerda que no podemos abandonar la lucha contra el terrorismo'.

Entre las filas del PS ha habido algunas críticas esta mañana por el hecho de que el RAID hubiera esperado 30 horas para tratar de detener a Merah.

A las 13.22, el presidente Nicolas Sarkozy, intervenía confirmando la muerte de Merah. 'Se está desarrollando una investigación para saber si el asesino tuvo cómplices [...] Nuestros compatriotas musulmanes no tienen nada que ver con los actos locos de un terrorista'

'Sé que puedo contar con la fraternidad y la vigilancia de todos los responsables religiosos -continuó- La República no tolerará este tipo de coportamientos en su propio suelo'

'Cualquier persona que consulte a partir de ahora sitios que hagan apología del terrorismo serán sancionados penalmente', anunció.

En torno a las 14.30 horas, se espera también una rueda de prensa del fiscal de París, François Molins. 

Tras el asesinato el pasado fin de semana de tres paracaidistas en Montauban -dos de origen magrebí y otro caribeño- todos los focos se centraron en la posibilidad de que el autor de los ataques fuera un exmilitar francés.

Rápidamente, los medios de comunicación comenzaron a seguir la pista a tres soldados que en 2008 fueron retratados haciendo el saludo romano y sujetando una bandera con una esvástica. La Policía consiguió localizar a dos de ellos primero y después de una investigación intensa también localizó al tercer sospechoso.

La IP del ordenador de su hermano y el ciclomotor utilizado en los atentados fueron la clave para localizar a Merah Pero el martes por la tarde, un día después del asesinato de un rabino, sus dos hijos y otra niña a las puertas del colegió judío Ozar Hatorah de Toulouse, las cosas cambiaron.

Los investigadores analizaron las imágenes de las cámaras de vigilancia y seguridad de la zona, comprobaron que el sospechoso era la misma persona que había asesinado a los militares y descartaron la pista de los exmilitares.

A continuación, una serie de hallazgos quizá casuales, provocaron que la Policía centrara todos sus esfuerzos en localizar a Merah. Primero, gracias a la dirección IP (Protocolo Internet) de su hermano, Abdelkader, detenido por posesión de explosivos y acusado de reclutar combatientes para enviarlos a Irak.

El primer soldado asesinado, Imad Ibn Ziaten, había colocado un anuncio en internet para vender su moto. Merah se puso en contacto con él mostrándose interesado por el vehículo y después le mataría. La Policía localizó la cita y la dirección de Abdelkader.

Después se localizó el concesionario donde Merah había adquirido el ciclomotor con el que llevó a cabo los atentados. Era una Yamaha de color gris oscuro.

Los responsables de la tienda recordaron que después de la venta una persona llamó preguntando cómo podía desconectar el dispositivo antirrobo y decidieron contárselo a la Policía. Nuevamente había sido Abdelkader el autor de la llamada. Los agentes comprobarían que después, en el caso del colegio judío, Merah había pintado la moto de blanco.

A partir de ahí la inteligencia comenzó a estudiar a ambos hombres. Descubrieron que Merah era responsable de una quincena de delitos en Francia, que había viajado a Afganistán y Pakistán y que formaba parte de un grupo salafista radical en Toulouse. Localizaron su domicilio y el martes por la noche comenzó el asedio que ha terminado con el terrorista saltando por la ventana de su domicilio.