'Ahora estoy en paro', contesta Sandro que, después de retirarse del fútbol, lideró la dirección deportiva del Málaga. Sin embargo, el jeque tenía otros planes y Sandro volvió a su tierra, a Tenerife, donde promete que 'no ha tenido la opción de volver al fútbol'. Ahora mismo, no es su prioridad ('estoy aprovechando para culturizarme y para disfrutar de mi familia, acabo de tener mellizos'), pero sabe que el regreso no será fácil. 'Si no me ha llamado nadie hasta ahora será por algo. Hay pocos puestos y somos muchos'.

Sandro sí se apuntó al INEM y ha cobrado la prestación que todavía no se le ha agotado. Pero ¿quién le iba a decir a un futbolista que jugó en el Madrid de Valdano y en Primera con Málaga o Levante que acabaría cobrando el paro? 'El fútbol ha cambiado mucho y cada vez está más difícil'. Eso no quita que se haya desenamorado de este deporte. 'No, para nada. Yo creo que veo más de lo que puedo ver. No se me escapa nada, no quita que algún día pueda volver y hay que estar al tanto'.

La suerte de Sandro es que tiene sus ahorros. 'Puedo tomarme la vida con tranquilidad'. La declaración es rutinaria. 'Es la ventaja de haber jugado al fútbol y de haber vivido una época en la que se pagaba muy bien. Quizá los que vengan no puedan decir esto'. La crisis, en realidad, está en todos los lados. 'Uno a veces se cansa de ver los telediarios', insiste Sandro, que por ahora no teme por su familia. 'Mi padre tiene una empresa de gua guas en Arona que no va mal. ¿Mis cinco hermanos? Una es profesora de educación física y ahora está en política, otra tiene una empresa de ‘Rent a car', otros trabajan en la empresa familia..., en fin que no me quejo'.

Sandro sabe que es difícil hablar así. 'Hay gente que lo está pasando muy mal'. Pero ¿volver al fútbol? 'No sé, ya veremos, ahora no veo opción y prefiero pensar en otras cosas, pero sé que la vida da muchas vueltas'.