España seguirá siendo una e indivisible para los socialistas españoles. Porque el debate abierto en Catalunya sobre el derecho a decidir, que se ha trasladado también a las relaciones entre el PSC y el PSOE no va a modificar su concepción de país. Tampoco lo modificará la propuesta para reformar la Constitución en clave federal que tienen previsto poner encima de la mesa los próximos meses. El secretario general de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba no ha podido ser más claro: 'Nuestro concepto de España no va a cambiar', ha insistido durante su intervención en la reunión interparlamentaria del Grupo Socialista que se ha celebrado esta mañana en el Congreso de los Diputados.

Lo que ha venido a decir el líder del PSOE es que por mucho que sus socios catalanes apoyen el derecho a decidir, algo que rechazan de plano el resto de los socialistas, ni uno ni otro respaldará nunca la independencia de ninguna parte del Estado. El partido, ha recalcado Rubalcaba, va a priorizar su lucha por la 'igualdad entre todos los españoles', por lo que no existe la posibilidad de que una parte decida por el todo, como ya recalcó el secretario general durante la reunión del Comité Federal del sábado.

El discurso que ha pronunciado este martes ante los diputados, senadores, europarlamentarios y portavoces socialistas en los parlamentos autonómicos ha sido prácticamente calcado al que defendió ante el máximo órgano de decisión del partido entre congresos. Así, ha vuelto a insistir en que para poder reformar el modelo territorial buscando un equilibrio entre quienes quieren más independencia y los que abogan por más centralismo es necesario reformar el Senado, para lo que resulta imprescindible modificar la Constitución.

Será, en todo caso, una reforma 'limitada, meditada y medida', y partiendo de la base de que la Carta Magna de 1978 ha constituído un 'éxito' para la reciente historia democrática del país. Nada de incluir el derecho a decidir, como ha llegado a plantear el PSC en la propuesta de resolución que presentó ayer en el Parlament. Rubalcaba ni siquiera ha hecho mención a esa discrepancia que aún persiste con sus socios catalanes, a pesar de que ambos han conseguido consensuar un discurso común en torno a la instauración de la España federal. 

Más flexible, pero con un discurso muy similar al del secretario general se ha pronunciado antes de la reunión del grupo la exministra de Defensa y diputada del PSC, Carme Chacón. Preguntada sobre el derecho a decidir en los pasillos del Congreso, la socialista catalana ha recalcado que su apuesta es esa reforma constitucional para convertir España en un Estado federal, un modelo que, ha comentado, 'no es casualidad' que sea el 'más extendido en el mundo' especialmente en países que tienen 'hechos identitarios'. 'Ahora esa es nuestra prioridad, primero la reforma de la Constitución', ha insistido.

Para ella, un Estado federal significa 'unión en la diversidad, reglas claras, posibilidad de reconocimiento identitario dentro del conjunto federal y también una mejor fiscalidad basada en la ordinalidad', algo que, ha recordado, no sólo viene pidiendo Cataluñ¡nya, sino también otras comunidades. Además, ha apelado al 'sentido común' del resto del partidos y ha subrayado que la crisis que atraviesa España 'ha deteriorado y puesto en entredicho tantas cosas' que ahora el país necesita 'consenso y valentía para una reforma que no sólo vaya a modificar el modelo territorial sino que pase también por una profunda democratización de las instituciones' y de la relación de los partidos con la sociedad.