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Las revoluciones tienen nombre de canción

'Grándola Vila Morena', la señal en clave con la que se dio inicio a la Revolución de los Claveles, se ha convertido en un símbolo de protesta en Portugal. En España, otras canciones fueron también himno

YERAY CALVO


Calló el político, cantó el pueblo. Eso es lo que ocurrió el pasado 15 de febrero en el Parlamento portugués, cuando el presidente luso Pedro Passos Coelho tuvo que interrumpir su discurso para dar paso a la voz del pueblo. Decenas de manifestantes del movimiento ‘Que le den a la troika' entonaron la canción Grándola Vila Morena para protestar de la manera más simbólica, con la señal en clave con la que se dio inicio a la Revolución de los Claveles el 25 de abril de 1974 y que ponía fin a una dictadura de más de medio siglo. 'De todas las maneras que se puede interrumpir un sesión, ésta es sin duda la de mejor gusto', comentó sonriente el presidente luso consciente de la carga simbólica que le era arrojada a la cara en aquel instante.

Unos meses antes, en septiembre de 2012, la misma canción fue convertida en himno, en la marcha más numerosa que se recuerda en los últimos años, frente a los recortes que el gobierno de Passos Coelho iba a ejecutar, coincidiendo con la evaluación de la troika.


'En cada rostro igualdad, el pueblo es quien más ordena'

La canción de José Zeca Afonso se ha convertido en un himno revolucionario en el país y es habitual que se cante en las manifestaciones. La canción, compuesta en homenaje a la Sociedad Musical Fraternidad Operari Grandolense de la Vila de Grândola, logró pasar la censura de la dictadura. El propio Zeca no fue consciente de su importancia hasta meses más tarde, cuando su presencia comenzó a ser repetitiva en los momentos de mayor exaltación en el país.

Otro músico que no tuvo ni la más remota idea de lo que habían significado sus canciones para ciudadanos oprimidos fue Sixto Rodríguez, conocido como Sugarman, cuya historia ha sido retratada en el documental ganador de un Oscar Searching for Sugar Man. El contenido social de sus letras hizo que sus canciones se convirtieran en himnos. Su álbum Cold Fact se convirtió en símbolo de lucha contra el apartheid para una generación de sudafricanos. Él, mientras, seguía con su vida como obrero de la construcción ajeno a lo que estaba pasando al otro lado del charco.


'Este sistema va a caer pronto'

Rodríguez, cantautor de origen mexicano, publicó dos discos -Cold Fact y Coming from reality- que pasaron absolutamente desapercibidos en Estados Unidos. Una carambola del destino hizo que dichos trabajos cruzaran el Atlántico para inyectar de crítica una sociedad sacudida por la opresión y la censura.


'La vida es eterna en cinco minutos'

Para el recuerdo también quedarán las canciones de Víctor Jara, todo un referente de la canción protesta, de origen muy humilde, y que fue torturado salvajemente y asesinado por los soldados de la dictadura chilena de Augusto Pinochet. Firme defensor de la paz, compuso El derecho a vivir en Paz. Te recuerdo Amanda otra una de sus canciones más famosas, un homenaje al amor de 'dos obreros de cualquier fábrica de cualquier lugar de nuestro continente'.


'Vendrá un día en el que todas nosotras trabajaremos en libertad'

En Italia Bella Ciao es una canción popular que se empleó para rechazar el fascismo durante la II Guerra Mundial. La canción, de autor desconocido, trata el paso del tiempo que transcurre y que se malgasta durante los trabajos forzados. Traducida a varios idiomas, ha sido además versionada por multitud de intérpretes. En Venezuela, Los que mueren por la vida, de Alí primera, fue utilizada por Hugo Chávez para acercar el pensamiento bolivariano al pueblo. La misma canción sonó en el funeral del dirigente venezolano cantada por sus simpatizantes en la plaza Bolívar: 'Canta, canta, compañero. Que tu voz sea disparo, que con las manos del pueblo no habrá canto desarmado. Canta, canta compañero, los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos'.

¿Y qué hay de España?

Basta echar un vistazo atrás para ver cómo L'Estaca ocupa un lugar destacado en este apartado del descontento social. La canción, compuesta en plena dictadura franquista por Lluís Llach, consiguió a través de la metáfora de la atadura convertirse en un himno de la lucha por libertad.


'¿No ves la estaca a la que estamos todos atados? Si no conseguimos deshacernos de ella nunca podremos caminar'

Otra de las canciones que más trascendió en el imaginario colectivo de la protesta española fue Al vent, del cantautor valenciano Raimon. Una canción que también simboliza la lucha contra la dictadura franquista y que se convertiría en el anhelo de aquellos que querían vivir en democracia.


'Al viento, la cara al viento, el corazón al viento, las manos al viento, los ojos al viento, al viento del mundo'

Ay Carmela es la canción que cantaban los guerrilleros españoles durante la lucha con las tropas de Napoleón en la Guerra de la Independencia y que recuperaron los soldados del bando republicano durante la Guerra Civil. Una canción que también es conocida como El Paso del Ebro o El Ejército del Ebro.

'Pero nada pueden bombas. Rumba la rumba la rum bam bam. Donde sobra corazón. Ay Carmela, ay Carmela'

A las barricadas
es otra de las canciones que más evocan los conceptos de lucha y libertad, himno además de la Conferencia Nacional del Trabajo. Fue una canción sindicalista que se popularizó durante la Guerra Civil. Por último, El Canto a la libertad de Labordeta o el A cántaros de Pablo Guerrero pusieron voz al grito desesperado de una sociedad que reclamaba libertad, entre muchas otras.

¿Qué canción protesta crees merecedora de añadir a la lista de más emblemáticas? ¡Opina en los comentarios!

Reportaje: ¿Qué fue de la canción protesta?

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