'Parece que va a ser un buen concierto pero falta escuchar los primeros acordes'. Son las palabras de Scott A. Singer, portavoz y fundador de La Asociación de Músicos de Madrid (AMM), creada para proteger los intereses de los músicos callejeros de Madrid.

Uno de los principales motivos por los que se creó esta asociación fue la ordenanza que impulsó el Ayuntamiento de Madrid en la que se prohibía la música en el centro de la ciudad. Todo formaba parte de un plan para regular la música callejera en dicho distrito, del que poco a poco se ha ido conociendo con trazo gordo y a cuentagotas parte de la reglamentación. No obstante, la predisposición del consistorio parece favorable: 'Agradecemos la colaboración y la cercanía con la que nos ha estado recibiendo el concejal presidente del distrito, David Erguido, para escuchar las propuestas. Estamos contentos con el talante, ahora nos lo tiene que demostrar con la letra pequeña', afirma Scott A. Singer a ‘Público'.

Una de las principales novedades de la regulación es el casting que se realizará a los candidatos a músicos callejeros. El Ayuntamiento de la capital ha enviado este lunes las bases de la convocatoria en las que se explicará detalladamente el proceso de selección y que se publicará esta semana en el BOAM. Lo que se ya se sabe es que los músicos deberán superar una audición y presentar su currículum. 'Nos han prometido que las pruebas tratan de determinar que la persona interpreta música y no hace ruido. Nos han dicho que no buscan a virtuosos, sino a gente que sepa hacer música', explica Scott A.Singer.

Una vez publicada las bases en el BOAM, se abrirá un plazo de 30 días para enviar las solicitudes. Una vez cerrado el plazo tendrán lugar las pruebas de selección, y una semana más tarde ya estará configurada la lista definitiva de los músicos con permiso para tocar en la zona centro. 'Según la proyección del concejal los músicos podrán estar tocando ya en diciembre', revela Singer. Los artistas contarán con un permiso 'gratuito' para un año, prorrogable para otros cinco.

Al margen de la prueba de selección quedan otros aspectos relevantes pendientes. De los que no se sabrá la letra pequeña hasta antes de la prueba de selección, o al menos así se lo ha prometido el concejal a los músicos. Uno de los aspectos en los que hay consenso es en la limitación de horarios: de 10 a 22 horas en invierno, y de 10 a 23 horas en verano. Con un parada de 15 hasta las 17 horas para la siesta.

En lo que Singer se muestra totalmente en desacuerdo es en la prohibición de actuar en zonas consideradas como de altas emisiones sonoras: las declaradas en la ZPAE como de 'máxima protección', los 'puntos calientes' de la contaminación acústica, según ha explicado el edil. Es el caso de barrios como Chueca o Malasaña. 'Los músicos van a pagar la factura de las terrazas y el tráfico', denuncia Singer. La Asociación de Músicos espera que el concejal muestre su brazo a torcer y ceda, al menos, en determinadas calles 'que son más peatonales'. No obstante, para Singer la prioridad ahora es que 'se devuelva la música a las calles del centro de Madrid'.