Público
Público

La operación salida arranca con el tráfico habitual de cualquier viernes

PÚBLICO/AGENCIAS

La normalidad, salvo retenciones puntuales propias de un viernes en las carreteras de salida de Madrid, es la protagonista en el arranque de la primera fase de la operación especial de Tráfico con motivo de la Semana Santa, el periodo del año donde, en menos tiempo, se concentra el mayor número de desplazamientos.

Serán este año 12,5 millones de desplazamientos, 500.000 menos que en 2013, durante once días, divididos en dos fases.

La primera, que ha dado comienzo a las tres y terminará el domingo con una previsión de 3 millones de desplazamientos, ha arrancado sin complicaciones en las carreteras, a excepción de tráfico más intenso en la A-3 y la A-5, según ha destacado un portavoz de la DGT.

Pequeñas retenciones, ha asegurado, habituales en un viernes a primera hora de la tarde en Madrid, como también las que se registran en estos primeros momentos de arranque de la operación especial en la salida de Barcelona por la AP-2 o en la vía de circunvalación principal de Sevilla, la S-30.

La DGT se ha propuesto como reto no superar las 26 muertes en carretera de la pasada Semana Santa La cuarta parte de los desplazamientos de este fin de semana se producirán en la zona centro (Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha sobre todo), mientras que un 20 por ciento tendrán como destino el Levante.

Para garantizar la fluidez y seguridad de esos movimientos, 10.000 agentes de la Guardia Civil estarán de servicio estos días, así como los más de 13.000 empleados de las empresas de conservación y los 600 funcionarios de los centros de gestión de tráfico.

La DGT, como dijo ayer su máxima responsable, María Seguí, se ha planteado como reto no superar las 26 muertes en carretera de la Semana Santa del pasado año y, para ello, pondrá el ojo en las carreteras secundarias, porque es allí donde se produce el mayor porcentaje de fallecidos.

Además de estas vías y la velocidad, Tráfico intensificará sus controles de alcohol y drogas y de la utilización de los dispositivos de seguridad como el casco, el cinturón o los sistemas de retención infantil.

Como explican en la página de la DGT, los atascos se forman cuando el número de vehículos que circulan sobrepasa la capacidad de la vía, así, una autovía tiene capacidad para 2.000 vehículos, 4.000 si es de dos carriles. Cuando el número de coches que circulan se acerca a la cifra máxima o la sobrepasa, comienzan los primeros frenazos y se forma el atasco.

Este problema suele darse debido a la reducción del número de carriles, ya sea por un accidente, una avería, etc., aunque también puede deberse a otras causas: la presencia de vehículos pesados, las curvas pronunciadas, retenciones a los conductores.

1 CONTRA LA AFLUENCIA, PLANIFICACIÓN

Tratar de evitar los días y horas de mayor afluencia de vehículos y las carreteras donde se prevén los mayores problemas, planificando nuestro viaje, es una alternativa para evitar las retenciones y, a la vez, evitar que estas se produzcan. Estudie la infografía con los días y horas que se prevén más conflictivos y trate de ajustar sus viajes a horas menos complicadas. GPS, webs (por ejemplo, la de la DGT) y apps también pueden ayudar a sortear estas dificultades.

Gráfico de las peores horas y días para salir y volver publicado en la web de la DGT. DGT

2 CUANDO HAY ACCIDENTE, SEÑALIZACIÓN
En muchas oportunidades, la reducción de carriles se produce por un accidente –en España se produce un golpe de chapa cada dos minutos, más o menos– o avería, que reduce temporalmente el número de carriles utilizables. La señalización del mismo, mediante los triángulos correctamente situados, previniendo a los demás conductores, y la retirada del vehículo al arcén puede no solo reducir la retención, sino evitar peligro y nuevos accidentes. Revisar los elementos básicos del vehículo antes de emprender el viaje puede evitar algunos 'sustos'.
3 CONTRA EL VICIO DE MIRAR…
En multitud de oportunidades se produce una retención adicional en el sentido en el que se ha producido el accidente e, incluso, en el sentido contrario. Se trata del llamado 'efecto mirón', conductores que ralentizan su marcha para 'enterarse' de qué ha ocurrido o que, incluso, frenan. Esto, además de provocar mayores retenciones, conlleva el riesgo adicional de provocar nuevos accidentes. Evite mirar, aunque le 'pique' la curiosidad.
4 SOLIDARIDAD CONTRA LA REDUCCIÓN DE CARRILES
Cuando acaban los accesos/salidas con mayor número de carriles, cuando se reduce su número por accidentes, averías u obras, se producen retenciones que pueden degenerar en atascos. Últimamente, expertos como Mario Arnaldo (CEA) o Tomás Santacecilia (RACE) han abogado por implantar un sistema de paso alternativo obligatorio a quienes circulan en estos casos (salidas saturadas, reducciones de carril por obras, averías…). Unos lo llaman 'intercambio por cremallera' y otros 'solidaridad altruista', pero consiste en el paso intermitente y alternativo de un vehículo de cada carril.
5 NO SEA AGRESIVO, SEA EFICIENTE
La conducción agresiva, con frenazos y acelerones, cambios constantes de carril, sin guardar la distancia de seguridad, origina frenazos y, debido al llamado efecto acordeón, caídas bruscas de la velocidad de circulación, multiplicando frenazos y tiempos de recorrido. La conducción a una velocidad constante, previendo frenazos, no solo le permitirá ahorrar gasolina y evitar emisiones contaminantes, sino que hay estudios que aseguran que circulando todos a una velocidad inferior, pero constante y manteniendo la distancia de seguridad, el conjunto avanza más rápidamente.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias