La decisión del PSC de abstenerse en todas las votaciones del Debate de Política General excepto las suyas ha evitado este jueves que el Parlament aprobase la comparecencia del president de la Generalitat, Artur Mas, por la posible implicación de CDC en el 'caso Palau'.

ICV-EUiA ha sometido a votación una propuesta de resolución que instaba al president de la Generalitat a 'aclarar ante la ciudadanía si está implicado o no en el caso del posible desvío de recursos del Palau de la Música hacia CDC, y a comprometerse a depurar todas las responsabilidades públicas que puedan derivar de este caso u otros, como el de las concesiones a las empresas de ITV'.

Sin embargo, la votación no ha prosperado por los votos en contra de CiU y la abstención de PSC y SI, que han hecho insuficientes los apoyos de PP, ERC, ICV-EUiA y C's a la comparecencia de Mas.

Antes del verano fue ERC quien, en una tensa reunión de la Junta de Portavoces, salvó a Mas de que el Parlament votase si debía comparecer para explicar la posible vinculación de su partido con el desfalco del Palau de la Música.

Antes del verano fue ERC quien salvó a Mas de que el Parlament votase si debía comparecer

Entonces, los republicanos esgrimieron que rechazaban la comparecencia de Mas para salvaguardar la institución de la Presidencia de la Generalitat, y reclamaron a cambio que las explicaciones las diese el secretario general de CDC, Oriol Pujol.

Fuentes socialistas habían explicado antes de las votaciones, tras una larga reunión del grupo, que el PSC se iba a abstener en todas las votaciones que no fueran sobre sus propias propuestas de resolución, con el objetivo de dejar claras sus posiciones.

Si el PSC hubiese mantenido la postura que defendió en la Junta de Portavoces antes del verano, CiU hubiese perdido la votación y Mas habría recibido un mandato del Parlament para dar explicaciones sobre los casos de corrupción que presuntamente salpican a CDC.

Aun así, el de este jueves ha sido el último pleno de la legislatura, por lo que los mandatos de la Cámara decaen una vez se disuelva con la convocatoria oficial de las elecciones catalanas, previstas para el 25 de noviembre.