Esperanza Aguirre no presentará su candidatura a la Presidencia del PP y ha pedido una aclaración sobre la supuesta invitación a abandonar el partido hecha por Mariano Rajoy, quien ha asegurado que jamás se le ha pasado por la cabeza la marcha de la presidenta madrileña del Partido Popular.

Rajoy y Aguirre intentaron hoy limar asperezas, después de que el pasado sábado Rajoy enviara desde Elche una serie de mensajes y reflexiones, dirigidos la mayoría de ellos a Aguirre, pero sin citarla expresamente en ningún momento.

"Si alguien se quiere ir al partido liberal o al conservador, que se vaya", fue el reto lanzado por Rajoy, a la vez que explicó que se presenta a la reelección porque se lo han pedido sus compañeros, no porque lo haya hecho ningún periódico ni ninguna radio, y defendió que en el PP caben liberales, democristianos y socialdemócratas.

Tras reunirse hoy con el presidente valenciano, Francisco Camps, quien ya ha expresado su respaldo absoluto a Rajoy, Aguirre ha dicho que no puede creer que el líder del PP quiera "echarla" del partido. "Como no lo puedo creer, no", ha respondido a la pregunta de si se sintió aludida.

Pero como algunos medios "han interpretado lo contrario", cree que "quizá sería muy bueno" que Rajoy "lo aclarara".

Esta vez Rajoy sólo ha guardado silencio unas horas y, a través de un portavoz del PP, ha asegurado que jamás se le ha pasado por la cabeza que Aguirre pueda estar en otro partido, y ha dicho que cree que es un "gran activo" y contará con ella si es reelegido en el cargo.

Esas fuentes populares han explicado que Rajoy pretendió en Elche "garantizar la unidad del partido y la independencia".

Aguirre ha revelado también que no presentará su candidatura a presidir el PP, ya que no tiene intención de hacerlo y no la ha tenido nunca.

Pero ha precisado: "Yo, como jugadora de cartas, de póquer y de mus, que soy, de momento para poder descartarte tienen que darse las cartas, y es que las cartas no se han dado".

Además, ha señalado que se siente "cómoda" en el PP y ha dicho que no ha pedido un debate ideológico en su partido, sino uno con los adversarios políticos. "No sé de dónde ha salido esa distorsión", ha subrayado.

Por su parte, Camps ha negado que en Elche oyera a Rajoy invitar a nadie que no se sintiera cómodo en esta formación a abandonarla, porque en ella "no existe la palabra expulsión".

"Yo soy del PP" y en esta formación "no hay familias ni corrientes", ha aseverado al ser preguntado si se siente identificado con la corriente liberal en el seno de su partido.

También ha comparado la trayectoria política del PP con un largometraje "apasionante" que tendrá un "final feliz" y del cual no puede extraerse de forma aislada ningún fotograma ni frase, porque de lo contrario, ha dicho: "al final, no tenemos la película".

El ex portavoz del PP en el Congreso Eduardo Zaplana ha entrado en el debate precongresual al rechazar que líderes autonómicos como Camps, Ramón Luis Valcárcel o Javier Arenas "comprometan" para Rajoy los votos de los compromisarios de sus respectivos territorios.

Su sucesora en el cargo, Soraya Sáenz de Santamaría, ha apuntado que Rajoy ha dado "una muestra de autoridad", en tanto que el diputado Esteban González Pons ha dicho que su partido podría llegar a estar en peligro de ruptura si dejan que el PSOE gane el XVI Congreso.

El PSOE también ha entrado en el debate interno del PP, ya que José Blanco ha considerado que es una "expresión descomunal de autoritarismo" que Rajoy haya dicho "el que no esté conmigo, que se marche", y ha aconsejado a ese partido que recurra a la democracia para "encontrar su camino".

Además, el ex presidente del Gobierno Felipe González ha pedido que no se dramatice sobre el momento que atraviesa el PP, ya que cree que es una situación que viven todos los partidos políticos en las mismas circunstancias.