"No lo llaméis regreso. He estado aquí durante años", canta Whitney Houston en lo que efectivamente es su último álbum de regreso.

La cantante pop de 46 años, residente por mucho tiempo en las listas de discos más vendidos durante las décadas de 1980 y 1990, termina oficialmente el lunes con una pausa de siete años con la publicación de su sexto disco en Estados Unidos "I Look To You".

Las primeras críticas son prometedoras y su discográfica, Arista, espera que se convierta en una de las grandes ventas del año.

La industria de la música necesita desesperadamente un éxito. Las ventas anuales de discos en Estados Unidos de 2009 están en declive por octava vez en nueve años, golpeadas por la recesión, la piratería y la competencia de otras formas de entretenimiento como los videojuegos.

A Houston le vendría bien un éxito. Su anterior trabajo "Just Whitney", de 2002, también fue calificado como un regreso y fue el que peores ventas obtuvo en su carrera.

La cantante recibió más atención en los años siguientes por su atormentada vida privada, incluyendo varios períodos de rehabilitación por drogadicción y su amargo divorcio de la ex estrella del R&B Bobby Brown.

"Es un mundo de Beyonce", dijo Caryn Ganz, editora de la revista Rolling Stone. "No creo que Whitney siga teniendo un puesto claro y no creo que tampoco lo tenga Madonna", señaló.

La editora predice que las primeras ventas serán fuertes y luego caerán.

Arista está de acuerdo con la primera mitad de esta afirmación. Fuentes de la industria esperan que el álbum venda entre 300.000 y 400.000 títulos en Estados Unidos durante su primera semana, llegando fácilmente al primer puesto a finales del verano.

"Este es un evento cultural", dijo Scott Seviour, el vicepresidente de marketing y desarrollo de artistas de la discográfica. "El entusiasmo y energía para este lanzamiento es palpable", afirmó.