La presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, aseguró ayer que ya hay señales en la economía que indican 'algo más de actividad' y añadió que, con las medidas que están adoptando los gobiernos y que calificó de adecuadas, espera ver en los próximos meses 'indicios más generalizados en el mundo entero'.

Entre las señales a las que hizo referencia están la subida de los precios de algunas materias primas y que hay más actividad en los puertos. Sin embargo, Botín reconoció que existe 'bastante incertidumbre a nivel global', aunque espera ver en los próximos meses'más señales'.

Señales, pero de otro tipo, son las que espera ver el presidente de Morgan Stanley Asia, Stephen Roach, quien auguró también ayer que la economía mundial se aproxima a una 'segunda oleada de la crisis financiera' que se caracterizará por el debilitamiento de la rentabilidad de las empresas de todo el mundo, lo que afectará negativamente a su capacidad para devolver los créditos a los bancos y a otras entidades financieras'.

El presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, intentó, por su parte, aportar algo de optimismo. Tras las declaraciones de los últimos días del premio Nobel Paul Krugman, que avisaba de una etapa 'terrorífica' y de la insuficiencia de los planes de la Unión Europea para combatir la crisis, Trichet afirmó en la emisora de radio gala Europe1: 'Hay un acuerdo bastante general de todas las instituciones públicas y privadas para pensar que 2010 puede ser el año de la recuperación moderada'. Aunque también advirtió que el año 2009 será 'muy, muy difícil'. En todo caso, puso el acento en que la recuperación 'dependerá de laconfianza'.

El director general del Instituto de Estudios Económicos, Juan Iranzo, señaló que 'se empiezan a ver algunos atisbos de cambio de tendencia' y se está 'recuperando ligeramente la confianza'.

El presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, afirmó que ya no existen problemas de liquidez porque 'lo peor de la crisis financiera está superado'.

La entidad, que celebra hoy Junta de Accionistas, tendrá un representante en el consejo del banco luso BCP, y anula la apertura de una oficina en Portugal. Oliu explicó que el desembarco en el consejo implicará que el Sabadell aplace sine die la apertura de una oficina de banca de empresas en Portugal porque, a su juicio, sería 'incompatible'.