Público
Público

Anthony no quiso hablar del futuro y Bryant sintió emociones encontradas

EFE

Noche de estrellas en el Pepsi Center, donde el alero Carmelo Anthony se reivindicó como tal al frente de los Nuggets de Denver, que ganaron 118-112 a Los Ángeles Lakers y a su figura, el escolta Kobe Bryant, que sintió emociones encontradas al perder la condición de invicto pero lograr nueva marca.

"No es el momento de hablar de mi futuro dentro de los Nuggets, lo único que deseo es jugar al baloncesto, luchar al máximo y que los Nuggets se mantengan como líderes de división", declaró Anthony al concluir el partido y haber sido la estrella de su equipo con un doble-doble de 32 puntos y 13 rebotes.

La victoria no sólo permitió a los Nuggets (5-4) romper una racha de dos derrotas consecutivas y ser los nuevos líderes de la División Noroeste, sino que también se quedaron con el honor de romperles la condición de invictos a los Lakers después de que llegaran al Pepsi Center con marca perfecta de 8-0.

"Siempre es algo muy especial superar a un equipo como los Lakers, actuales bicampeones, y más al estar invictos", destacó Anthony. "El triunfo nos debe motivar para seguir haciendo mejor las cosas cada día y demostrar que somos ganadores y con aspiraciones".

La cruz de la moneda la protagonizó Bryant, que no pudo alcanzar el primer gran objetivo que ya se había establecido para esta temporada, como era superar la barrera del 11-0 en un comienzo de temporada que logró el equipo de la liga de 1997-98.

La frustración de la derrota de equipo la trató de compensar con el triunfo individual al ser el jugador más joven en la historia de la NBA que alcanza la marca de los 26.000 puntos, al superar en 34 días al legendario Wilt Chamberlain.

"Nunca debimos perder este partido, lo teníamos controlado, y en el cuarto periodo nos faltó el acierto y la intensidad que ha sido nuestro gran éxito para ganar los partidos en la recta final", señaló Bryant, que aportó 34 puntos, pero no tuvo su mejor inspiración encestadora al fallar 21 de 32 tiros de campo.

Sin embargo, Bryant que en la primera parte falló 10 de 14 tiros y se quedó con 13 puntos, también reconoció que sus aciertos llegaron cuando la defensa de los Nuggets ya no tuvo la misma intensidad.

A pesar de haber tenido tantos fallos, Bryant con 32 años y 80 días, es el jugador más joven que tiene en su poder 26.000 puntos al anotar un tiro en suspensión a los 49 segundos de haber comenzado el tercer periodo.

"Siempre he dicho que las marcas individuales son de un gran valor moral, pero sin el apoyo de los compañeros tampoco hubiesen sido posibles y más cuando se trata de anotar puntos", valoró Bryant.

Por su parte, Gasol reconoció que la clave del partido estuvo en el buen trabajo que hicieron los hombres bajos del ataque de los Nuggets.

"Con una alineación de hombres bajos fueron siempre muy rápidos en el ataque permanente, al correr y anotar con gran efectividad, y más teniendo la ventaja de campo", comentó Gasol, que logró su sexto doble-doble de la temporada, segundo consecutivo, después de aportar 17 puntos con 20 rebotes.

El entrenador de los Lakers, Phil Jackson, mantuvo la misma teoría que Gasol y dijo que la diferencia al final fue el acierto de los hombres bajos de los Nuggets, que siempre respondieron con carrera y anotación, algo que al final su equipo no pudo igualar.

George Karl, el entrenador de los Nuggets, fue más claro cuando dijo que el jugador que había rota el balance a favor de los Nuggets había sido el base reserva Ty Lawson.

"Pienso que Ty estuvo grandioso", declaró Karl. "Cuando nos decidimos por la alineación de hombres bajos y rápidos, nuestra velocidad superó a su fuerza y altura", agregó.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias