¿Los Black Eyed Peas te convencerían para comprar en Target o Eric Clapton te llevaría a cambiarte a T-Mobile?

Los publicistas parecen creerlo y la participación de famosos se disparó un 150 por ciento en los anuncios emitidos durante la entrega de los premios Grammy de 2010, revirtiendo lo ocurrido en 2009, según mostraron unas cifras conocidas el lunes.

Un estudio anual de los anuncios de los Grammy de la consultora GreenLight mostró que Black Eyed Peas, Clapton, Drew Barrymore y Luke Wilson fueron algunas de las celebridades que promocionaron Target, T-Mobile, Olay, AT&T y otras marcas durante la retransmisión de la importante gala.

"Nuestra investigación de los anuncios durante los Grammy sugiere que hay un rebote definitivo en las promociones de los famosos", dijo en un comunicado el vicepresidente de GreenLight, David Reeder.

"En 2009, vimos a las marcas recortar costes al concentrarse en el uso de música pop para mantener cierta presencia de famosos en sus anuncios. Este año, estamos viendo cómo las marcas (...) también están contratando (...) estrellas para maximizar el alcance e impacto de su mensaje", agregó.

GreenLight dijo que su informe anual es un barómetro para identificar tendencias respecto a cómo las marcas están usando celebridades y música pop en sus anuncios de televisión.

Reeder dijo que el análisis mostró que las marcas nuevamente están asociándose con famosos y usando la música pop para maximizar el reconocimiento de la marca y forjar conexiones emocionales con los consumidores.

En total, cerca de un 15 por ciento de los anuncios exhibidos durante la entrega de los Grammy de 2010 contaba con la participación de celebridades, un salto de un 150 por ciento desde el año pasado.

Mientras tanto, un 22 por ciento de los anuncios contaba con música pop, casi el mismo nivel de los últimos dos años, pero un declive desde su máximo de un 38 por ciento en 2007.

Las empresas de automóviles estadounidenses dominaron los anuncios de los Grammy, con un 16 por ciento del total.

una unidad de CBS -, según cifras preliminares de audiencia divulgadas el lunes, con 25,8 millones de televidentes en Estados Unidos, un aumento de un 35 por ciento respecto a 2009.