El Gobierno argentino dijo el viernes que quiere adelantar para junio los comicios legislativos de octubre, en una medida sorpresiva que apunta a minimizar daños electorales ante la profundización de la crisis económica global.

La presidenta, Cristina Fernández, afronta un duro desafío en las elecciones de medio término, en momentos en que su imagen positiva ronda el 30 por ciento y la economía, el principal activo de su gestión, está en plena desaceleración.

"Sería casi suicida embarcar a la sociedad de aquí hasta octubre en una discusión permanente de posicionamientos cuando el mundo se cae a pedazos y los pedazos se nos pueden caer encima de ese mundo", dijo Fernández en un acto público.

"La crisis es grave y demanda una actitud diferente de todos nosotros, que todos los esfuerzos estén orientados precisamente a lograr sostener la actividad económica y el nivel de empleo", añadió.

El adelanto de los comicios será solicitado por el Gobierno a través de un proyecto de ley que introducirá el lunes al Congreso, donde el partido oficial es mayoría.

Analistas y opositores rechazaron la medida calificándola de maniobra electoral.

"Creo que es porque efectivamente (la presidenta) teme que el impacto de la crisis global va ser mayor en octubre que ahora", dijo a Reuters la analista Graciela Romer.

Tras crecer a altas tasas entre 2003 y 2008, la economía argentina comenzó a enfriarse en los últimos meses por problemas locales y el impacto de la debacle internacional.

El último fin de semana, el Gobierno de Fernández sufrió una duro revés en las elecciones de legisladores locales de la norteña provincia de Catamarca, que para muchos representó una señal de que la fuerza del Gobierno se está debilitando.

Argentina renovará en las elecciones legislativas la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.

El alcalde de Buenos Aires, el opositor Mauricio Macri, había anunciado el jueves el desdoblamiento de los comicios, trasladando a junio la elección de legisladores locales y dejando en octubre la de diputados nacionales por el distrito.

DEBILIDAD

La oposición política criticó la decisión de cambiar las elecciones al 28 de junio y dijo que también busca dar menos tiempo a los adversarios del Gobierno para formar alianzas.

"Esta decisión que pretende el Gobierno nacional intenta obstaculizar que se una la oposición", dijo Gerardo Morales, presidente de la opositora Unión Cívica Radical.

De acuerdo a lo establecido en el código electoral, los comicios legislativos debían realizarse este año el 25 de octubre, pero admite modificaciones de la fecha a través de una decisión del Congreso.

El Gobierno deberá apurarse para enviar el proyecto al Poder Legislativo ya que la ley determina que la convocatoria de elecciones debe realizarse 90 días antes de la fecha fijada.

El Ejecutivo perdió aliados en el Congreso en los últimos meses, con la deserción de senadores y diputados que han cuestionado la política agropecuaria oficial y el estilo de gobierno de la presidenta.

Analistas sostienen también que el adelanto de los comicios buscaría evitar el efecto negativo de la dilatación de un conflicto con el sector agropecuario, que comenzó hace un año y afectó dramáticamente la popularidad de la presidenta.

En marzo del año pasado un intento del Gobierno de incrementar los impuestos a las exportaciones de granos enfureció a productores rurales, que paralizaron el comercio internacional y bloquearon carreteras, provocando el desabastecimiento de alimentos en ciudades.

En las últimas semanas, dirigentes rurales retomaron las negociaciones con las autoridades pero hasta el momento resultaron infructuosas y esta semana volvieron a protestar en las rutas, en un conflicto que podría extenderse.

En un sondeo de la página de internet de La Nación, el 70,71 por ciento de los participantes dijo estar en contra del adelanto de las elecciones mientras que el 17,87 por ciento estaba a favor y el 11,42 por ciento se manifestó indiferente.