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Sólo Argentina separa a Grecia de la gloria

Reuters

La selección de fútbol de Grecia puede no tener demasiadas ilusiones de cara a lo que tiene por delante en el Mundial a pesar de la euforia por su inesperada victoria frente a Nigeria.

La selección griega se enfrentará con el combinado argentino, que llega en muy buenas condiciones a su último encuentro por el Grupo B. Incluso si los europeos pueden luchar en busca de un empate y sumar un punto, esto podría no ser suficiente para pasar a la segunda ronda.

En la mente del seleccionador alemán de Grecia, Otto Rehhagel, debe rondar el hecho de que durante los primeros 30 minutos del encuentro contra Nigeria en el estadio Free State de Bloemfontein sus pupilos parecieron faltos de ideas.

La defensa se mostró débil, el equipo erró sus pases y tuvo muchas dificultades para avanzar en el terreno de juego. Después de que Kalu Uche anotara para Nigeria a los 16 minutos, todo parecía indicar que el cuadro africano podría propinarles una vergonzosa derrota.

Sin embargo, el encuentro dio un giro inesperado cuando Sani Kaita fue expulsado a los 33 minutos por una agresión infantil al dar una patada a Vassilis Torosidis cuando la pelota no estaba en juego.

Esto dio impulso a los griegos y desde ese minuto, iniciaron una recuperación en ataque hasta que anotaron los dos goles necesarios para superar a las "águilas", gracias a Dimitris Salpingidis y Torosidis. Con este resultado, el equipo helénico superó su registro en los Mundiales, donde figuraba sin goles ni victorias.

Sin embargo, Grecia podría lamentar su flojo rendimiento durante los últimos 15 minutos del encuentro frente a un cuadro nigeriano alicaído. El segundo lugar del Grupo B podría decidirse por diferencia de goles si Nigeria vence a Corea del Sur. El equipo asiático, que se impuso por 2-0 a Grecia en su debut en el torneo, podría clasificarse si derrota a Nigeria.

Grecia podría hacerlo en caso de derrotar a Argentina, algo que inscribiría su nombre en los hechos insólitos del Mundial.

"Nos vamos a enfrentar con Argentina, un equipo de clase mundial", dijo Rehhagel.

"Claramente ellos serán mejores que nosotros y tenemos que ver cómo los abordamos. Antes que nada estamos felices de tener posibilidades de clasificarnos. Todos sabemos que el equipo argentino tiene una calidad extraordinaria".

Sus jugadores seguían celebrando la victoria del jueves.

"No me importa lo que pase ahora", dijo Torosidis, uno de los goleadores. "Estoy encantado por el equipo, y por los aficionados que nunca dejaron de creer en nosotros".

INSPIRACIÓN

Si Grecia necesita una fuente de inspiración para el partido frente a Argentina, basta con que recuerde su actuación en la Eurocopa de 2004, cuando resultaron campeones al derrotar en Lisboa a un Portugal lleno de estrellas como Cristiano Ronaldo y Luis Figo.

Argentina por su parte, puede confiar en sus propias figuras para abordar el tercer encuentro, ya que hasta sus suplentes son extraordinarios.

La idea del triunfo todavía despierta esperanzas entre los aficionados griegos que dejaron el calor de su país para acompañar a los suyos en las heladas llanuras de Sudáfrica.

"Argentina no va a jugar con su equipo titular, así que tenemos una oportunidad", dijo el empresario Nikos Paschalikis al ver un resumen del partido en un centro comercial de Bloemfontein lleno de felices aficionados griegos.

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