Roberto Morales.

Madrid, 17 may (EFE).-

.

-- BARCELONA.

Es el mejor campeón de la historia de la Liga. El equipo que más puntos suma -86 a falta de dos jornadas-, con el máximo goleador, Samuel Eto'o, el portero menos goleado, Víctor Valdés. Y está a sólo tres tantos de superar los 107 del récord de aquella maquina goleadora blanca dirigida por John Benjamin Toshack.

Pero, por encima de los números, el Barcelona de Pep Guardiola deja en el olvido un año sin títulos con una de las mejores plantillas de su historia, a base de buen juego y espectáculo. Con un estilo que enamora. Un fútbol de toque con una verticalidad inigualable. En España no ha tenido rival. Solo el Manchester United puede discutirle ser el mejor equipo del mundo. El veredicto en Roma en una final donde ya hay un vencedor: el fútbol.

.

-- RAÚL GONZÁLEZ.

La cara del capitán define el final de campeonato de un Real Madrid hundido desde el varapalo del clásico. El peso del escudo no es suficiente ante equipos que se juegan la temporada y tras la apisonadora azulgrana, Valencia y Villarreal destrozan el estado anímico de un equipo en depresión deportiva, que tacha días del calendario a la espera del final de la Liga.

Raúl cumplió 700 partidos con el Real Madrid en El Madrigal. Está a tan sólo doce partidos de Manolo Sanchís para convertirse en el jugador que más veces ha defendido la camiseta y el escudo madridista. Lo logrará la próxima temporada, con 32 años, cuando la llegada de nuevas estrellas aumentará la competencia y comenzará a habituarle al banquillo.

.

-- ARTURO GARCÍA 'ARZU'.

La relación entre jugadores del Real Betis y su afición atraviesa un momento tan delicado que hasta la celebración de un gol clave para la permanencia acaba en una polémica que deja tocado a un jugador cuyo corazón es verdiblanco.

Arzu, formado en la cantera bética, marcó el gol de la jornada y su afición malinterpretó su celebración. Fue doble, con gestos al cielo en memoria de su abuelo y el dedo gordo a la boca para su hija. La grada pensó que mandaba callar. El jugador que más huevos recibió esta semana en su coche a la salida de un entrenamiento, escuchó silbidos y hasta un doloroso "vete ya". La gota que colma el vaso. Le resta un año de contrato pero en verano hará caso a los que ya no le quieren.

.

-- TOMAS UJFALUSI.

La semana en la que el Atlético de Madrid limpió definitivamente su vestuario de jugadores poco comprometidos con la causa, Tomas Ujfalusi cumplió con creces como lateral derecho ante la baja de John Heitinga, en un encuentro ante el Valencia que era una auténtica final por la 'Champions'.

La raza de Ujfalusi le ha hecho salvarse de una temporada marcada por los errores defensivos rojiblancos. Su trabajo y el liderazgo que ejerce en la zaga, ayudó a que el canterano Álvaro Domínguez salvase con nota el marcaje a David Villa. El Atlético construyó desde la defensa un triunfo decisivo. Ante Athletic Club y Almería, dos equipos con sus deberes hechos, debe rematar la faena. Maniche y Seitaridis, que habría sido titular, se quedaron por el camino con toda justicia, cansados en el club de tanta indisciplina.

.

-- MANUEL PRECIADO.

La emocionante y agonizante lucha por la salvación dejará numerosos héroes en el final de la Liga. Junto a Mauricio Pochettino que resucitó a un Espanyol hundido, destaca el trabajo de un técnico como Manuel Preciado en el Sporting de Gijón con la plantilla más modesta de Primera división, junto a la del Numancia.

Preciado, un luchador de los banquillos españoles, ha encontrado en Gijón su segunda casa. Es adorado tras el histórico ascenso y dispone de un equipo hecho a su medida, repleto de jugadores a los que inculca lucha hasta el último segundo. A dos jornadas del final vuelve a salir del descenso y a dejar uno de sus titulares únicos, pagará el viaje a los aficionados que no puedan desplazarse a Valladolid.