La presidenta de UPN, Yolanda Barcina, ya ha comunicado personalmente a Mariano Rajoy el acuerdo de la Ejecutiva regionalista de entablar conversaciones con el PP para un posible pacto electoral, pese a que desde el PPN se considere "no muy elegante" que UPN plantee "líneas rojas" a la negociación.

La conversación entre Barcina y Rajoy se produjo anoche, después de que la presidenta recibiera el respaldo de la Ejecutiva de UPN, un apoyo que se le dio de forma mayoritaria pese a las discrepancias planteadas públicamente por su predecesor hasta hace dos años, Miguel Sanz.

Sanz fue en 2008 el artífice de la ruptura del pacto que desde 1991 mantenían UPN y PP, por el que todos los diputados que en este tiempo ha tenido el partido regionalista han sido elegidos en listas populares.

Al respecto, en conferencia de prensa el secretario general de UPN, Carlos García Adanero, ha reiterado hoy que el planteamiento irrenunciable de su partido es el de conservar en el Congreso la "voz propia" que actualmente tiene por pertenecer al Grupo Mixto, un punto criticado por el presidente de PPN, Santiago Cervera.

Éste se ha mostrado "satisfecho" por el acuerdo de UPN al entender "posible" explorar la posibilidad de concurrir juntos a las próximas elecciones, aunque se ha mostrado crítico con los límites puestos por García Adanero, ya que quienes han llamado a la puerta del PP "son ellos".

Preguntado sobre la posibilidad de que un posible acuerdo sea concurrir a las elecciones con la marca UPN-PP para después, una vez conseguidos escaños, los regionalistas pasen al Grupo Mixto y desde allí apoyen las políticas populares, ha eludido responder amparado en su negativa a "negociar a través de los medios de comunicación".

En todo caso, y tras advertir que tampoco incidirá en los "posibles problemas internos" del partido interlocutor, en referencia a las posibles discrepancias entre los regionalistas, ha incidido en que el "programa" será la base de la negociación.

Sobre este asunto también ha sido preguntado el portavoz socialista, Juan José Lizarbe, quien, dado que UPN y PSN mantienen un pacto en el Ejecutivo foral, ha considerado "deseable" que el partido regionalista no se "distraiga" de los asuntos de Navarra, ha dicho tras mostrarse "preocupado" por las "distracciones, que nunca son positivas".