Best Buy tuvo unas ventas y beneficios más débiles de lo esperado, perjudicada por el aumento de precios para expandir su negocio y por unos índices de la demanda de los consumidores más débil, lo que provocó un descenso de sus acciones de hasta un 6,8%.

La mayor cadena de electrónica en Estados Unidos dijo que los compradores se mostraron indecisos en un trimestre que suele ser más flojo en las ventas. Este asunto ha desgastado a muchos minoristas, mientras el desempleo se mantiene elevado y los problemas económicos de Europa pesan en la recuperación mundial.

"El gasto del consumidor ha sido irregular y parece que nuestros consumidores están operando en indicios más amplios del entorno", dijo el consejero delegado de Best Buy, Brian Dunn, en una conferencia telefónica con analistas.

Best Buy registró una caída de ventas en las tiendas de televisores durante el primer trimestre fiscal del año, así como en videojuegos, música y cine.

Los analistas también destacaron un aumento del 12.3% en ventas y en gastos generales y administrativos, añadiendo presión a los márgenes de Best Buy que continúa inmersa en una guerra de precios con los grandes minoristas Wal-Mart Stores y Amazon.com.

"Es desde luego una preocupación importante. Cuando piensas en los precios, ahí están Amazon, Wal-Mart y otros minoristas importantes que se centran en esta categoría y sobre todo compiten en precios", dijo el analista de Edward Jones, Matt Arnold.

El beneficio neto fue de 155 millones de dólares (125 millones de euros), o 36 centavos de dólar por acción en los tres meses que terminaron el 29 de mayo, en comparación con los 153 millones, o 36 centavos por acción del año anterior.

Los analistas esperaban un promedio en ganancias de 50 centavos por acción, según Thomson Reuters.