Madrid/Valladolid 7 dic (EFE) - Caja Duero y Caja España intensificarán esta semana las negociaciones sobre su fusión, ya que se ultimará el plan definitivo para su unión y mantendrán una reunión con la Junta de Castilla y León para tratar el proyecto, que contempla que la nueva entidad opere en abril.

Las cajas solicitarán al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) entre 550 y 600 millones de euros para realizar la fusión, según señalaron fuentes financieras.

Las mismas fuentes informaron de que las entidades y la consultora KPMG mantendrán el próximo miércoles una reunión en Valladolid con la Junta de Castilla y León en la que se tratarán varios de los aspectos incluidos en el plan, como el cierre de unas 200 oficinas y una reducción de cerca de un millar de puestos de trabajo.

En la negociación sobre los flecos de la fusión, que creará la séptima caja de ahorros española por volumen de activos y la quinta por depósitos, también se abordará la estructura corporativa de la nueva entidad, el "reparto" de los órganos de dirección y la ubicación de las sedes de la caja, agregaron las mismas fuentes.

Además incidieron en que sobre la mayoría de estos aspectos no se diserta en el informe elaborado por KPMG sobre la fusión y destacaron que la operación busca crear una caja "más fuerte" en el actual escenario económico, como defiende el Banco de España.

El organismo ha reiterado su intención por reducir las actuales 45 cajas de ahorros hasta un número menor para conseguir entidades con mayor solvencia y estabilidad financiera.

Los directores generales de Caja Duero y Caja España, Lucas Hernández e Ignacio Lagartos, respectivamente, mantuvieron la pasada semana una reunión con representantes del Banco de España y KPMG, que les entregó el borrador del informe para la fusión que ha realizado después de "rehacerlo" una vez que Caja Burgos abandonó la fusión.

El Banco de España valoró el plan de negocio y mostró su satisfacción por el cumplimiento del calendario establecido, al tiempo que está previsto que el próximo jueves tenga el plan de negocio definitivo, señalaron las cajas.

Según las previsiones del proceso de fusión, está previsto que antes de Navidad esté preparada toda la documentación necesaria para que la operación pueda acogerse a las medidas del FROB, según destacaron las entidades.

Los consejos de administración de las cajas aprobarán el inicio del proyecto definitivo de fusión este diciembre, mientras que cerrarán los aspectos legales y mercantiles en otras reuniones que se realizarán en febrero.

Las asambleas generales de las cajas darán el visto bueno definitivo a la fusión en marzo, lo que permitirá que la entidad fruto de la unión esté operando a principios de abril.

El proceso de fusiones de cajas puesto en marcha puede suponer una reducción de hasta un 40 por ciento en el volumen de sucursales, es decir, el cierre de unas 900 oficinas de estas entidades, según un informe de la consultora Everis.