El capitán del Real Madrid, Iker Casillas, reconoció que ha sido bueno recibir "un toque de atención para no despistarse", como les ocurrió ante el Málaga, al que remontaron tras encajar dos goles (3-2) en la ida de los octavos de final de Copa del Rey.

"Como al principio no vamos a ningún lado. Nos hemos complicado el partido nosotros solos. Son dos acciones a balón parado y por tanto tenemos que prestar mucha más atención. Lo esperábamos difícil, pero los que hemos empezado hoy a hacer mal las cosas hemos sido nosotros", manifestó en la zona mixta del Bernabéu.

"Se ha juntado todo. Las vacaciones, la Navidad, el estar alejados unos de los otros. Todo tiene que empezar a rodar. A veces es mejor un toque de atención para no despistarse", añadió.

Casillas analizó lo que hicieron mal en la primera parte y que tuvieron que cambiar en la segunda. "Había que prestar más atención, dejar de jugar individual y ser un colectivo".

"Hemos regalado dos goles al Málaga y la segunda parte ha sido totalmente diferente. Hemos buscado los espacios y menos mal que hemos metido el primer gol de Sami (Khedira) que ha abierto un poco la lata y hemos conseguido meter el 2-2 al minuto y medio. Y ya el tercer gol era merecido", valoró.

Por eso, para el capitán madridista el triunfo final "fue justo" pero deja todo abierto para La Rosaleda. "No se va cómodo. Es una ligera ventaja. Supongo que allí sumando el público y el campo, el Málaga reúne todas las características para complicarnos".

Por último, dedicó elogios al holandés Ruud Van Nistelrooy que hoy regresó al Santiago Bernabéu y recibió el calor de la afición madridista. "Ruud ha sido muy importante, hemos disfrutado mucho con él y el público sabe premiar a esos jugadores que han defendido esta camiseta y que han recibido aplausos".