El comisario europeo de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, ha considerado hoy "inaceptable" que Israel mantenga el corte de suministro de combustible a Gaza y ha instado a que "inmediatamente" cese un castigo que pone en peligro la misión de la ONU y los servicios básicos en la franja.

Las reservas de combustible de la agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Gaza se terminarán hoy y cerca de un millón de refugiados no podrán recibir asistencia básica o ayuda alimenticia facilitadas por la UNRWA y el Programa Mundial de Alimentos.

"La ayuda humanitaria es neutral y no busca otorgar ninguna ventaja a ninguna de las partes, ni implica ninguna forma de reconocimiento político. Sólo trata de cubrir las necesidades mínimas de la población civil", ha recordado el comisario en un comunicado en el que traslada su "apoyo total" a las agencias que trabajan en los territorios palestinos.

Michel ha catalogado de "esencial" que Israel, el único suministrador a la zona, restablezca el abastecimiento de gasóleo que cortó en junio pasado, tras la toma de poder por parte del grupo islamista Hamás.

La situación económica y humanitaria en la franja de Gaza se ha visto agravada desde que se iniciara entonces un férreo bloqueo a este territorio palestino, habitado por un millón y medio de personas.

Para el representante del Ejecutivo comunitario "es inaceptable que la ONU se tenga que plantear suspender sus operaciones humanitarias simplemente por falta de combustible para sus vehículos".

También lo es, a su juicio, el que servicios públicos como la recogida de basuras, el tratamiento de aguas residuales o los hospitales estén en riesgo de colapso por el mismo motivo.

La Comisión Europea tiene un programa de ayuda de casi treinta millones de euros en Gaza, de los cuales 10,2 están destinados a la agencia de la ONU cuyas actividades están en peligro, provenientes del presupuesto de 2007.