Público
Público

Un centenar de escritores dan el pistoletazo al Día del Libro en el tradicional desayuno de Sant Jordi

EFE

Más de un centenar de escritores han dado esta mañana el pistoletazo inicial al Día del Libro en Barcelona en el tradicional Desayuno de Sant Jordi, tras el que la mayoría de los autores posan en una foto de familia en un céntrico hotel de la ciudad.

El más madrugador de todos ha sido nuevamente este año Joan Barril, que a las 08.00 horas ya estaba en la Estación de Sants para recibir a los primeros viajeros del AVE de hoy y firmar ejemplares de su libro "Sobre la distancia. Cataluña-España".

Barril ha confesado que "es un día en el que acabas cansado sin saber por qué, quizá por la cantidad de caras que pasan por delante tuyo a lo largo de la jornada".

A la misma estación ha llegado poco después, y también en AVE, el leridano Pep Coll, ganador del último premio Sant Jordi con "Les senyoretes de Lourdes", en su primer Día del Libro en Barcelona.

Aturdido por la muchedumbre de editores y periodistas con que se ha encontrado ya a esas horas, Coll ha reconocido que "veo venir que en Barcelona (San Jordi) tiene una dimensión diferente de Lleida".

Entre los autores que han asistido a este acto previo a la jornada festiva del libro destacan Juan José Millás, Boris Izaguirre, Núria Amat, Fernando Sánchez Dragó, Lucía Etxebarría, Angela Becerra, Tracy Chevalier, Francisco González-Ledesma, Juan Eslava Galán, Jaime Peñafiel, Najat El Hachmi, Fernando Schwartz, Paul Preston y Albert Espinosa.

También estaban los deportistas Carles Rexach e Isidre Esteve, los cantantes Fito y Lucrecia y periodistas-escritores como Nicolás Valle, Manel Lucas, Silvia Soler, Carles Quílez y Llucia Ramis.

Millás, que ya anoche recogió el premio Qué Leer que conceden los lectores de esta revista, ha declarado que le parece un día "fantástico", porque es "un encuentro con libreros, editores, otros escritores y lectores".

Tras expresar su extrañeza por el hecho de que una jornada como la de hoy no acaba de arrancar en Madrid, Millás ha dicho que "es todavía un misterio saber por qué todo un pueblo se siente culpable si no vuelve a casa por la noche con un libro y una rosa".

El aragonés Agustín Sánchez Vidal también ha expresado una cierta "envidia de que esta fiesta, en la que se vive el libro a pie de calle, se haga sólo aquí y no en todas partes".

El glamouroso Boris Izaguirre, con unos verdes zapatos de charol, ha revelado que siente en Sant Jordi "vivir un momento Hollywood" y ha agregado: "me encanta el contacto con los lectores, pero más con los editores".

El televisivo y especialista en terapias naturales Txumari Alfaro, que afronta su cuarto Día del Libro en Barcelona con "bastante alegría y optimismo, y más con este día tan precioso que ha amanecido", ha señalado que "es increíble el cariño con el que me trata la gente en Cataluña, que incluso se me humedecen los ojos".

En cambio, Lucía Etxebarría se está planteando dejar de venir a la capital catalana en un día como hoy porque "soy agorafóbica, me dan miedo las aglomeraciones y en una edición anterior por poco morimos aplastadas por un grupo de niños que seguían a los Lunnies, que firmaban en la misma caseta".

Mientras la escritora catalana de origen marroquí Najat El Hachmi, ganadora del último premio Ramon Llull, se mostraba tímida ante su primer Sant Jordi, el veterano futbolista Carles Rexach ha descubierto que en su primera experiencia "de puertas adentro, Sant Jordi es muy diferente de cómo se vive desde fuera", y ha anunciado algo más que un deseo, "que la jornada acabe redonda con una victoria del Barça frente al Manchester".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias