Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Colombia, Álvaro Uribe, aceptaron ayer la conformación de un "grupo de países amigos" que ayude a ambos Gobiernos a superar sus diferencias tras protagonizar un duro altercado en la Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe.

"Yo dije estoy de acuerdo que se conforme un grupo de amigos y que recuperemos la confianza y unas relaciones transparentes unas relaciones de cooperación, eso es necesario", dijo Chávez a periodistas después del incidente.

Fuentes de la delegación venezolana confirmaron a Efe que entre ambos presidentes se produjo "una discusión acalorada" cuando Uribe comparó el bloqueo de Estados Unidos sobre Cuba con el trato comercial dispensado por Venezuela a empresas colombianas.

Portavoces colombianos que solicitaron el anonimato explicaron a Efe que el presidente cubano, Raúl Castro, y el propio mandatario anfitrión, Felipe Calderón, tuvieron que mediar entre los presidentes para poner fin a la discusión.

"Nosotros ponemos toda la buena fe en esa dirección de relajar las tensiones", agregó Chávez, al señalar que la iniciativa surgió de varios países, entre los que citó a Argentina, Chile, Brasil, República Dominicana y México.

Por su parte, el presidente colombiano indicó a periodistas en un breve comentario que "el Gobierno de Colombia acepta el acuerdo que ha propuesto el Grupo de Río, en reuniones de esta tarde, presidido por el Presidente de México", en alusión a este grupo de amigos.

Fuentes colombianas indicaron a Efe que ese país y Venezuela aceptaron un acuerdo de dos puntos que implica que ambos Gobiernos "cesarán las intervenciones públicas que hagan daño" en los términos que establezca la declaración del Grupo de Río.

El segundo punto es el de buscar "un grupo de países, de personalidades, de instituciones, de confianza de Venezuela y de Colombia, que ayuden a superar estas diferencias".