Por Nelson Banya

La epidemia de cólera en Zimbabue yacausó la muerte de más de 2.000 personas entre casi 40.000 quecontrajeron la enfermedad normalmente evitable, informó elmartes la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El brote se suma a la crisis humanitaria que vive el paísafricano, donde el presidente, Robert Mugabe, y la oposiciónestán estancados en una negociación por el reparto del poder yel veterano líder se niega a ceder ante los pedidos deOccidente para que renuncie.

Una actualización de las cifras al 12 de enero mostró que2.024 zimbabuenses murieron por cólera, de un total de 39.806casos.

La enfermedad transmitida por el agua y que provoca diarreasevera y deshidratación, pero que en condiciones normales puedetratarse fácilmente, se expandió por las 10 provincias deZimbabue debido al colapso de los sistemas de salud e higiene.

La OMS señaló que el 89 por ciento de los 62 distritos delpaís están afectados.

El Gobierno zimbabuense alertó que la epidemia podríaempeorar en la temporada de lluvias, que tiene su pico entreenero o febrero y que finaliza en marzo. Las inundaciones, quepueden afectar fundamentalmente a las zonas bajas, ampliaríanla diseminación de la enfermedad.

El cólera se ha expandido a los vecinos de Zimbabue. Almenos 13 personas murieron y 1.419 se enfermaron en Sudáfrica.Botsuana, Mozambique y Zambia también informaron casos decólera.

Millones de zimbabuenses escapan a naciones vecinas enbusca de empleos y mejores condiciones de vida y, másrecientemente, detrás de un tratamiento médico adecuado, amedida que la crisis en su país crece.

El martes, una portavoz de inmigración dijo que Zambiahabía deportado a 190 zimbabuenses ilegales refugiados en laterminal de ómnibus de la capital Lusaka, por temor a laexpansión del cólera.

"LLegaron como simples visitantes pero luego comenzaron arealizar negocios sin los papeles necesarios. Tuvimos queactuar para detener la diseminación del cólera", indicó laportavoz Mulako Mbangweta a Reuters.