Real Madrid y Regal Barcelona pondrán el domingo el punto final a la Copa del Rey, en el clásico del baloncesto español que medirá a dos de los mejores equipos de Europa y pondrá la guinda a uno de los torneos más espectaculares del continente.

El Real Madrid venció el sábado cómodamente por 78-50 contra todo pronóstico al Caja Laboral gracias a un poderoso juego interior, mientras que el Barcelona tuvo más problemas previamente para superar al Power Electronics Valencia por 72-64.

El conjunto blanco llega a la final tras realizar un gran partido táctico en semifinales, ahogando a su rival, que echó en falta a su estrella Thiago Splitter. Los lituanos Darjus Lavrinovic, con 21 puntos y 7 rebotes, y Rimantas Kaukenas, con 15 puntos, fueron los jugadores más destacados.

Por su parte, el Barcelona se complicó un partido que tenía controlado ante el equipo valenciano. Los españoles Ricky Rubio, con 14 puntos y cuatro asistencias, y Fran Vázquez, con 16 puntos y seis rebotes, fueron los más destacados.

Madrid y Barça sólo se han enfrentado una vez en lo que va de temporada: el pasado diciembre en Vistalegre en un partido en el que el equipo catalán, dirigido por un gran Ricky Rubio, humilló al conjunto blanco delante de su afición.

El equipo dirigido por el italiano Ettore Messina, que se ha renovado respecto a ese partido con las altas de Marco Jaric y Ante Tomic, y la recuperación de la lesión de Sergio Llull, tiene ganas de revancha en una competición que lleva sin ganar 17 años.

Los de Xavi Pascual, que están realizando una temporada espectacular, son líderes en la ACB, con sólo dos derrotas en 22 partidos jugados, y también en el grupo de la Euroliga, competición en la que sólo han perdido uno de los 13 partidos que han disputado.

El Barcelona ganó la competición por última vez en 2007, precisamente ante el Real Madrid por 69-53, en un partido en el que Jordi Trías se llevó el galardón de MVP del torneo.

Será un gran partido en el que el Barcelona buscará demostrar que es el mejor equipo de Europa y el Real Madrid hacer ver que puede estar a la altura de los grandes equipos del continente y pelear por todas las competiciones.

Los Reyes de España confirmaron el viernes que estarán en el palco del BEC Arena de Bilbao para entregar la copa al ganador por primera vez desde 2001, edición en la que Pau Gasol se coronó como figura mundial.