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El compromiso político de Picasso por la paz en la Willy Brandt Haus

EFE

El compromiso político del pintor malagueño Pablo Picasso (1881-1973) con la paz es el tema central de una exposición inaugurada hoy en la Willy Brandt Haus de Berlín, sobre todo con obras realizadas en las décadas de los años 50 y 60.

Su obra gráfica política, con bocetos de grandes óleos, dibujos, grabados y carteles, así como fotografías y documentos conforman la muestra de mas de un centenar de piezas bajo el título "Pablo Picasso - Frieden (Paz)", en la sede central de la socialdemocracia alemana (SPD).

Los fondos de la exposición sobre los aspectos políticos de la obra de Picasso, organizada por la comisaria Karin Weber, proceden de la colección privada del mecenas francés Gérard Gosselin, quien destacó su "entusiasmo" por la posibilidad de mostrar en la capital alemana una parte de sus fondos.

La muestra destaca que el compromiso político de Picasso se inició ya en su juventud con el apoyo a los revolucionarios cubanos que luchaban por la independencia de la isla de España y alcanzó su plenitud en la Guerra Civil Española con su famoso cuadro sobre el bombardeo de Gernika.

Fotografías del Primer Congreso Mundial de la Paz en 1948 con la asistencia de intelectuales de 45 países en la ciudad polaca de Wroclaw abren la etapa política post-bélica del pintor español, una de la estrellas de la reunión.

Impresionado por la destrucción de la ciudad que pocos años antes fue la Breslau de la Silesia alemana, Picasso dibujó su mas famosa y reproducida paloma de la paz, a la que luego seguirían múltiples variantes.

Sus trabajos para las portadas de diarios como Liberation, Le Travallier Catalan, L'Humanite y Les Lettres Francaises figuran con originales en la exposición, al igual que retratos de Carlos Marx, el escritor y periodista ruso Ilja Ehrenburg, el astronauta soviético Juri Gagarin o el escritor español Antonio Machado.

Asimismo pueden apreciarse carteles de Picasso realizados en homenaje a figuras como el líder francés de la Resistencia Paul Eluard con motivo del 20 aniversario de su muerte o para celebrar el 10 Aniversario del Movimiento por la Paz.

Destaca también su conocido cartel de 1959 en favor del Comité Nacional de Ayuda a las Víctimas del Franquismo con la palabra "amnistía" en letras mayúsculas y un preso entre rejas ante el que vuela una paloma de la paz.

La exposición recoge una reproducción del Gernika y del texto redactado por Picasso sobre "El sueño y la mentira de Franco", acompañado por una copia de la serie de grabados que realizó en 1937 para un libro de solidaridad con la República.

Interesantes son también los bocetos de dos gigantescos óleos de cinco por diez metros sobre la guerra de Corea, que inevitablemente recuerdan al Gernika, aunque estos están realizados con profusión de colores.

Pablo Picasso participó en los años 50 y 60 en numerosos congresos de carácter pacifista para los que realizó múltiples dibujos, con frecuencia de palomas de la paz o con ramos de flores como el Décimo Congreso Mundial de los Partisanos de la Paz en Londres en 1950 o el Congreso Mundial por el Desarme General y la Paz en Moscú en 1962.

Su compromiso político le llevó a realizar numerosos dibujos publicitarios como "El ramo de flores" para el Congreso de la Paz en Estocolmo en 1958 o "El círculo de la amistad" para el Festival Mundial de la Juventud en 1959 en Viena.

También se solidarizó pictóricamente con actos como el Primer Congreso de Escritores y Artistas Negros en los años cincuenta en Francia o la Jornada de los Intelectuales en favor de Vietnam en 1968, para los que hizo sendos carteles.

Los organizadores de la muestra recordaron que "el vuelo de la paloma de la paz de Picasso a Berlín ha sido una historia llena de obstáculos", según comentó a Efe Gisela Kayser, responsable de la organización de exposiciones artísticas en la Willy Brandt Haus.

Hace 60 años, el régimen comunista de la extinta RDA no permitió al legendario literato Bertolt Brecht utilizar un dibujo de una paloma de Picasso como emblema del recién inaugurado teatro del Berliner Ensemble en Berlín Oriental por encontrarlo demasiado "formalista".

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