El XX festival internacional de fotoperiodismo de Perpiñan "Visa pour L'Image" (Visado para la Imagen) inaugura hoy dos semanas de exposiciones, coloquios, premios y proyecciones dedicadas al oficio de llevar la actualidad a millones de retinas a golpe de "click".

Desde el fotoperiodista Horst Faast, con cinco décadas a sus espaldas capturando la brutalidad de la guerra en Congo, Argelia, Vietnam, India o Israel, hasta Munem Washif, premio al joven reportero en la edición de 2007 con un trabajo sobre las condiciones de vida en su Bangladesh natal, mostrarán sus trabajos.

Dos fotógrafos de la treintena que llevarán a esta muestra en el sur de Francia las matanzas en Darfour y el Chad (Jan Garoup), la diáspora marroquí (Paolo Pellegrin) o la "vida loca" de los pandilleros "maras", que siembran el terror en Centroamérica (Christian Poveda), entre otros.

Realidad a borbotones, tan sórdida como estética, atrapada en fotografías que introducen en los hogares de todo el planeta historias sobre la clandestinidad, la desolación, la violencia o la miseria, impresas en papel, revistas y periódicos, en un ejercicio del que "nadie sale indemne", explican los organizadores.

Sin embargo, el director del festival, Jean-François Leroy, lamenta que la prensa no tome riesgos por la fotografía y que los diarios tengan demasiado interés en lograr beneficios económicos, cosa que, según él, hace veinte años no pasaba.

Quizá "habría que instaurar un 'impuesto people': tasar las fotografías de celebridades para financiar la verdadera fotografía", declaró Leroy al diario "Le Monde".

Además, "Visa pour L'Image" reconoce con seis premios el talento de los mejores fotoperiodistas del último año en las categorías de "Prensa Diaria", "Magazine", "News", "Joven", "Mujer" y "Humanitario", dotados con 8.000 euros cada uno.