Una subasta de arte impresionista y moderno organizada por Sotheby's no cubrió el lunes las expectativas que había despertado antes del hundimiento de los mercados financieros, aunque un lote se vendió por 60 millones de dólares (unos 46,8 millones de euros) y hubo récords de Degas y Munch.

Los responsables dijeron que la suma total de 224 millones de dólares, incluidas comisiones, estaba entre las mejores marcas históricas de Sotheby's para una venta de impresionistas y se declararon satisfechos con el resultado pese a que un tercio de los 70 lotes no se vendió.

Unos 135 millones de dólares del total procedieron de sólo tres cuadros: "Composición suprematista", de Kazimir Malevich, que alcanzó los 60 millones de dólares; "Vampire", de Munch, que se vendió por 38,16 millones; y "Danseuse au repos", de Degas, que se vendió por 37 millones, apenas por debajo de los 40 millones estimados.

"Cualquiera esperaría que la gente fuera más recatada en este entorno. Estamos vendiendo en un mundo muy incierto", dijo David Norman, copresidente de arte impresionista y moderno de Sotheby's.

Las casas de subasta han estado trabajando en las últimas semanas con los vendedores para ajustar sus expectativas y rebajar sus reservas (el precio mínimo por el que están dispuestos a vender las obras en una subasta).

Destacando las fuertes sumas que alcanzaron los tres lotes principales, el subastador Tobias Meyer comentó que "las grandes piezas se vendieron increíblemente bien". Otros responsables señalaron que el mercado para las obras maestras estaba "muy animado", y citaron los 60 millones que se pagaron por el cuadro de Malevich y que arrasaron con el anterior récord del artista, de 17 millones de dólares.

Sin embargo, entre los lotes que no se vendieron estuvieron obras de Van Gogh, Cezanne, Matisse, Monet y Modigliani, lo que algunos atribuyeron a que sus dueños fijaron precios poco realistas.

Las subastas continuarán el miércoles con la venta de dos importantes colecciones privadas en Christie's.