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Disminuye la mortalidad de las águilas imperiales en Doñana

Reuters

La alta mortalidad del águila imperial, la especie más amenazada de Europa, se ha podido frenar en el Parque Natural de Doñana gracias a un plan de recuperación puesto en marcha en 2006 por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

"Con técnicas de radioseguimiento, localización de ejemplares y control genético con amplificación de ADN de plumas se ha podido comprobar que la mortalidad ha vuelto a los valores normales" dijo en un comunicado dado a conocer el lunes por el CSIC el investigador que coordina el plan, Miguel Ferrer.

Esta reducción es consecuencia de "la provisión sostenida de conejos vivos en los territorios, lo que ha disimulado las salidas de las águilas de Doñana, y los planes para la erradicación del uso de venenos", añadió.

Los científicos impulsaron este sistema, que finaliza en 2010, al descubrir el mecanismo que aceleraba la extinción de esta especie.

"Cuando disminuía la densidad de las poblaciones imperiales, su fecundidad media también disminuía, de forma contraria a lo que predicen las leyes biológicas, lo que aceleraba la velocidad de extinción de la especie en la zona", al contrario de las forma natural de la regulación de las poblaciones, explicó Ferrer.

Los análisis revelan que la excesiva reducción de la especie desde 1992 hasta 2004, que pasó de las 15-16 parejas habituales de la zona durante la última mitad del siglo XX a 7-8 parejas, se debió al aumento de la mortalidad de los adultos, que pasó del seis por ciento al 12,1 por ciento. El 61 por ciento de los ejemplares fallecieron por envenenamiento.

"La aparición de veneno en Doñana parece estar asociada a la disminución de los conejos tras la aparición de la enfermedad de neumonía vírica. Entonces, las águilas tuvieron que ampliar su área de campeo al exterior del parque, zonas donde se habían aumentado los esfuerzos para eliminar al zorro y otros predadores usando métodos ilegales como el veneno", dijo Ferrer.

Además, con este plan el CSIC también ha logrado triplicar la producción de pollos en menos de tres años, de 3,5 se ha pasado a 10,5 al año. El objetivo para 2010 es alcanzar un mínimo de 10-12 parejas reproductoras de águilas imperiales y una producción sostenida de 9-14 pollos al año.

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