Se puede decir más alto, pero no más claro. El presidente de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC), Luis Berenguer, arremetió ayer contra el funcionamiento del mercado español de distribución de carburantes, al criticar 'la paradoja' de que, cuando el petróleo se encarece, 'los precios de los combustibles suben como cohetes, y cuando baja, o no lo hacen, o lo hacen a la velocidad de una pluma'.

Berenguer compareció para presentar una guía de la CNC sobre competencia en la contratación pública (ver información adjunta). En la ronda de preguntas, le interpelaron acerca del máximo histórico registrado por la gasolina (1,285 euros por litro, de media) el mes pasado y por el hecho de que el ministro de Industria, Miguel Sebastián, haya dado por buenos los argumentos del sector para explicar esas subidas: según las petroleras, que los carburantes valgan hoy, con el crudo a cien dólares, casi lo mismo que en el verano de 2008 (cuando el barril de Brent tocó su récord, 147 dólares), se debe fundamentalmente a las subidas de impuestos (dos en los últimos dos años) y a la depreciación del euro frente al dólar, divisa de referencia en el negocio petrolero.

Si el petróleo baja, el combustible 'no lo hace, o lo hace al ritmo de una pluma'

Todo ello pese a que la demanda, tras tocar techo en 2007, no remonta a causa de la crisis: según la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos, el consumo de gasolina descendió en 2010 un 5,6% y el de gasóleo de automoción, un 0,8%. Ya van tres años consecutivos de caídas. Pese a que la Comisión Nacional de la Energía (CNE), el regulador sectorial, comparte las tesis de Industria (dice que los márgenes de las petroleras han caído desde 2008), Berenguer (que ha admitido 'problemas de coordinación' con la CNE y con su equivalente en telecomunicaciones, la CMT) no se mordió la lengua: además de la citada metáfora sobre el cohete y las plumas, anunció que la CNC está haciendo 'un seguimiento' del sector y que 'en pocas semanas' publicará una actualización de un informe (no vinculante) de septiembre de 2009 que criticaba sin ambages la 'falta de competencia' entre las petroleras.

El presidente de la CNC, que enfila sus últimos meses en el cargo (acaba su mandato el próximo septiembre), se quejó de que el Gobierno no haya hecho caso de 'ninguna' de las propuestas contenidas en ese informe, entre las que estaba la de modificar el funcionamiento de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH, dueña de la red de oleoductos y controlada por las petroleras) o disminuir el poder de mercado de los tres grandes operadores (Repsol, Cepsa y BP).

'Se fortalece quien tiene posición de dominio', critica Berenguer

En su larga respuesta, el responsable del regulador de la competencia también ironizó con la inminente salida de Chevron del mercado español, anunciada el viernes pasado, con la venta a Cepsa de su red de gasolineras (que opera bajo la marca Texaco) en Canarias por un importe no especificado. En su opinión, esa decisión (y otras similares, como la que tomó la angloholandesa Shell en 2004), suponen 'que se está fortaleciendo quien tiene posición de dominio'. 'A lo mejor', añadió, las multinacionales del sector 'se van [de España] porque el mercado es tan competitivo que no les resulta rentable. Y a lo mejor alguno se lo cree', zanjó.

La contundencia verbal de Berenguer contrasta con la escasez de actuaciones del organismo que preside contra el sector: su última sanción a una petrolera por vulnerar la competencia data de hace diez años, cuando el entonces Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) exigió a Repsol y Cepsa que dejaran de fijar los precios en sus gasolineras abanderadas (las que no tienen en propiedad). A Repsol le correspondió una sanción de tres millones de euros, mientras que la multa a Cepsa (controlada actualmente por la francesa Total) ascendió a 1,2 millones. Ambas empresas recurrieron las decisiones de la CNC, que confirmaron tanto la Audiencia Nacional como el Tribunal Supremo.

Desde la creación, en 2007, de la CNC (que reforzó sus poderes tras la fusión del antiguo TDC y el extinto Servicio de Defensa de la Competencia), el organismo (presidido por Berenguer desde 2005) no ha abierto ningún expediente sancionador al sector. El entorno de la CNC reconoce las dificultades con las que se topa el organismo a la hora de probar pactos de precios entre las petroleras.