La compañía británica de bajo costo Esasyjet inauguró hoy una nueva base de operaciones en Francia -un mercado donde es "número dos"- en el aeropuerto parisino Charles de Gaulle, en el que entrará a competir directamente con Air France-KLM, el operador dominante de esa plataforma.

El presidente de Easyjet, Andy Harrison, no ocultó sus aspiraciones al señalar que su compañía es "más que nunca la mejor alternativa francesa a Air France" en conferencia de prensa, al término de un acto en la Torre Eiffel que contó con la presencia del secretario de Estado francés de Consumo y Turismo, Luc Chatel.

Chatel explicó que si había acudido al acto de la aerolínea británica es porque considera que "el desarrollo del 'low cost' en Francia es bueno para los consumidores y para el turismo", y señaló que el peso de estas compañías de bajo coste en su país es "insuficiente" si se le compara con lo que ocurre en los países del entorno.

De acuerdo con las cifras de Easyjet, la cuota de mercado de las aerolíneas de bajo coste en Francia se sitúa en torno al 19%, frente a una media europea del 37% y un pico del 55% en España.

Desde Charles de Gaulle, el grupo británico, que ya estaba instalado en el otro aeropuerto parisino, el de Orly, va a ofrecer vuelos diarios a Biarritz (en el País Vasco francés), Oporto (Portugal), Marraquech (Marruecos), Cracovia (Polonia) y Hamburgo (Alemania), así como nueve semanales a Venecia (Italia).

A partir de abril, Easyjet pondrá en marcha una nueva base de operaciones en Lyon, desde donde ampliará sus enlaces actuales a Londres Madrid y Roma con dos líneas diarias a Burdeos y Toulouse (ambos destinos en Francia), uno a Venecia (Italia), tres semanales a Oporto (Portugal) y Casablanca (Marruecos), y cuatro a Lisboa.

El objetivo global en Francia es pasar de ocho millones de pasajeros transportados este año a doce en 2011, cuando la aerolínea tiene previsto cubrir 80 destinos desde ese país.