Por Manuel María Ruiz

El sindicato mayoritario de España, Comisiones Obreras, no dudaría en convocar una huelga general para defender a los trabajadores contra eventuales recortes sociales en la actual situación de contracción económica, según el secretario general del sindicato, José María Fidalgo.

"Las huelgas generales en España se han convocado cuando ha habido una acción legislativa que amenazaba o recortaba un derecho de todos o de los más desfavorecidos", dijo Fidalgo en una entrevista con Reuters el viernes.

"Las huelgas generales en España se han convocado contra recortes sociales, no se han convocado para salir a la calle pidiendo que bajen los precios o que suban los sueldos (...) ese es el protocolo no escrito", añadió.

Fidalgo calificó de buenas las relaciones con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, como también lo fueron con el anterior de José María Aznar, aunque reconoció que siempre que aumenta el paro paralelamente aumenta la conflictividad, citando ahora el caso de Nissan.

"Hasta ahora no ha habido ninguna tijera encima de la mesa y espero que no la haya (...) Si la hay, ya sabéis: detrás de la tijera sale el sable", dijo.

En relación con la complicada situación económica y financiera, Fidalgo dijo que era de una intensa complejidad y pronosticó que sería larga, aunque no determinó durante cuanto tiempo podía extenderse antes de comenzar a remontar.

"Estamos en una crisis de una profundidad y una entidad de difícil tratamiento", indicó. Señaló que a los factores estrictamente domésticos se había sumado la crisis financiera internacional.

Según el responsable de CCOO, un patrón de crecimiento como el español basado principalmente en la expansión de la construcción residencial llevaba implícito su extinción al no contener elementos capaces de generar valor añadido.

"El modelo era muy vistoso, pero era frágil, asentado en la construcción residencial, cosa que no ha pasado en otros países", expresó.

Frente a este escenario adverso, Fidalgo dijo que la propuesta sindical pasa básicamente por reforzar la red de la protección social y generar una dinámica económica capaz de incentivar otro patrón de crecimiento.

CUMBRE WASHINGTON

Con relación a la cumbre del G-20 de este fin de semana en Washington, en la que estará presente España tras una intensa actividad diplomática, Fidalgo dijo que esperaba un mensaje que respalde el protagonismo de la economía productiva.

"Me gustaría que en Washington (...) lancen un mensaje de que hay que relanzar la economía básica, que es la economía productiva", dijo.

"Yo creo que esta es una crisis moral, es una crisis de malas costumbres. Malas costumbres son gastar más de lo que se tiene y creer que comprar una vivienda es una inversión", dijo.

CULPABLES DE LA CRISIS

Cuando se le preguntó por el papel de los analistas en el contexto de crisis financiera, Fidalgo les apuntó como responsables de una buena parte de la actual situación.

"Estoy hasta las narices de los analistas", dijo el líder sindicalista.

"Si el capitalismo ha entrado en crisis no ha sido por los salarios ni porque el movimiento obrero haya pegado un empujón para traer el socialismo, es que el mercado financiero lo han hundido los brokers que ahora nos van a dar recetas", dijo.

"Nosotros no negociamos con los analistas, negociamos con la patronal y la patronal no son analistas, son empresarios", dijo.

Fidalgo también expresó su convicción de que la crisis tenía un componente moral derivado del uso de prácticas inadecuadas durante años.