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ERC-IU-ICV y el BNG piden retirar la reforma laboral porque no creará empleo

EFE

El grupo parlamentario ERC-IU-ICV y el BNG pidieron hoy la retirada del decreto de reforma laboral porque a su juicio supone una mayor precariedad del mercado de trabajo, abarata el despido y no ayuda a salir de la crisis ni a impulsar el empleo.

Durante el debate de enmiendas a la totalidad al proyecto de Ley de la reforma laboral el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, aseguró que es la reforma laboral "más dura de la Democracia", ya que se hace "a favor de la patronal" y supone una "contrarreforma" y un "ataque desmedido contra los sindicatos".

Por este motivo, justificó la huelga general convocada por UGT y CCOO el 29 de septiembre, y así lo expresó también al portar un pequeño cartel en la solapa de su chaqueta en el que se podía leer "Sí a la huelga".

Al respecto añadió que "Rodiezmo es una metáfora para el Gobierno, que se desmarca de los suyos", en relación a la habitual participación de José Luis Rodríguez Zapatero en la fiesta minera que UGT celebra anualmente en esta localidad leonesa.

Llamazares criticó que la reforma laboral "refuerce" el poder de los empresarios ya que les permite "descolgarse" de los convenios colectivos, al tiempo que lamentó que se "legalicen" las agencias privadas de colocación permitiendo "privatizar" los beneficios.

El diputado de IU urgió a recuperar la causalidad de los contratos para que la inmensa mayoría sean fijos y no temporales y pidió hacer efectiva la tutela judicial con el fin de que el despido improcedente no se solucione con una indemnización sino con la recuperación del puesto de trabajo.

Además, reclamó la supresión del contrato de fomento del empleo y pidió que los trabajadores a tiempo parcial no realicen horas extraordinarias.

Igualmente el texto de la enmienda incluye el incremento de la cotización empresarial por desempleo para los contratos temporales y su reducción en los de carácter indefinido.

También introduce un Plan Industrial que apueste por la reconversión "ecológica" y un plan de infraestructuras y de vivienda.

Por su parte, el representante de ERC Joan Tardá advirtió de que sólo apoyarán una reforma laboral que acabe con la rigidez y la precariedad del mercado, centrándose en crear empleo estable, potenciando la ocupación juvenil y flexibilizando la negociación colectiva.

A su juicio la propuesta del Gobierno contiene elementos "inaceptables" como permitir que resulte más barato despedir a un trabajador que formarle para aumentar la eficiencia de su empresa.

Por el BNG, la diputada Olaia Fernández defendió la enmienda a la totalidad de su partido dado que a su juicio una reforma que "aumenta la flexibilidad en el despido" retrasará la salida de la crisis y "hará recaer sobre la clase trabajadora sus consecuencias más dramáticas".

Entre los aspectos "más desacertados" de la reforma, Fernández destacó la extensión a más colectivos del contrato de fomento a la contratación indefinida, la "confusa" redacción relativa a las causas objetivas del despido y el pago por el FOGASA de una parte de la indemnización.

Por contra, propuso un modelo que restrinja el uso de la contratación temporal estableciendo los supuestos en los que ésta no podrá efectuarse, y limitar la concatenación de contratos a un mismo trabajador.

También defendió un nuevo método para el cálculo de la indemnización por despido en los contratos temporales, basado en un porcentaje del salario bruto percibido, para así fomentar el contrato indefinido.

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