Esta vez no fue todo fruto de un sueño. La serie más longeva de la televisión española puso punto y final como el rosario de la aurora. Hospital Central dijo adiós después de doce años y 20 temporadas con un capítulo sangriento y desesperado. No hubo final feliz. Todo lo contrario.

Una expolicía con problemas psiquiátricos, interpretada por Blanca Portillo, decide tomarse la justicia por su mano después de que su marido muriera en el hospital. Alba vuelve al hospital para pedir responsabilidades, pistola en mano, y el doctor Rodolfo Vilches, interpretado por Jordi Rebellón, se hace el héroe para salvar de una desgracia a Manuela, su pareja. Pero Alba, al verse atrapada y acorralada dispara a bocajarro a Vilches, que fallece en el acto. 

Así, de golpe y sopetazo remató anoche Telecinco a la serie que más tiempo había permanecido en la televisión española. Pero es que además en el trágico capítulo final también fallecen otros cuatro personajes de la serie. El capítulo concluye con un monólogo post-mortem con imágenes del entierro del mítico doctor y un repaso de sus momentos en el Hospital Central. 

Sin embargo, este final no fue tan exitoso como el que tuvo hace una semana la primera edición del talent show La Voz. El estreno en Antena 3 de la película de animación Up se llevó el liderazgo del prime time.  La divertida historia de un niño que se cree explorador y un abuelo hastiado congregó a 3.540.000 espectadores, lo que se tradujo en un 18,8 de cuota de pantalla.

Hospital Central, por su parte, echó el telón con una audiencia de 2.276.000 espectadores y se tuvo que conformar con obtener el 12,8% de share. Por detrás, El Cid logró conquistar a 1.615.000 espectadores que vieron el clásico de Charlton Heston en La 1 de TVE.