Responsables de las principales farmacéuticas españolas criticaron el miércoles las últimas medidas aprobadas por el Gobierno para recortar aún más el gasto en medicamentos, calificándolas de cortoplacistas, generadoras de incertidumbres y negativas para el empleo y la inversión en I+D.

"El impacto a nivel social va a ser grande. La inversión en I+D se va a resentir de manera importante (...) Las compañías cuyo principal negocio esté en España lo van a sentir por la vía del empleo ... o el I+D", dijo Luis Mora, director de Pharmamar, la principal filial de Zeltia.

En esta empresa el impacto del decreto será de sólo el 0,2-0,3 por ciento de las ventas, porque el 90 por ciento de la facturación se produce fuera de España.

"Creo que el Gobierno está actuando a corto plazo, sólo atacando al déficit, sin mirar cómo hacer que el PIB crezca de verdad", dijo Mora en un foro de empresas de mediana capitalización en Madrid, preguntándose qué sucederá dentro de seis meses si la economía no crece.

En una línea similar se pronunció el director financiero de Rovi, Javier López-Belmonte, cuya compañía está actualmente evaluando el impacto de los recortes aprobados la semana en el Congreso.

"A nivel sectorial es una oportunidad que se ha brindado a las multinacionales para hacer una reducción en aquellas plantillas que están sujetas a fusiones internacionales (...) Muchas multinacionales se van a marchar".

También se mostró contundente Eduardo Sanchiz, director general de desarrollo de Almirall, farmacéutica que el martes revisó a la baja sus estimaciones para 2010 como consecuencia del tijeretazo en el gasto farmacéutico.

"Es un poco inquietante todas estas medidas que pretenden conseguir salud a bajo coste sea como sea ... lo normal en una sociedad sana es que el paquete del gasto farmacéutico siga subiendo dentro del gasto sanitario", dijo.

Como sus interlocutores, Sanchiz destacó el papel que juega el sector en cuanto a la inversión en I+D en España y consideró que las medidas del Ejecutivo se concentraban demasiado en la parte de la oferta en un país en el que el precio de los medicamentos está por debajo de la media europea, mientras las visitas médicas son tres veces superiores.

"Que no nos den caña porque dicen que estamos creciendo. Somos más parte de la solución que del problema. Y en segundo lugar, en este paquete de medidas veo una desproporción inmensa entre medidas sobre la oferta y medidas sobre la demanda. Todo lo que se ha hecho ha sido restrictivo sobre la oferta, desde congelar el sueldo al personal sanitario a actuar sobre la industria farmacéutica".

ANTECEDENTES

El jueves pasado, el Consejo de Ministros aprobó las medidas anunciadas una semana antes por el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, dirigidas a acelerar la reducción de déficit, recortando el gasto este año y el que viene en más de 15.000 millones de euros.

En lo que respecta a este sector en concreto, el Gobierno busca reducir en 1.300 millones de euros el gasto público en farmacia, unos 275 millones este mismo año.

Para ello impondrá, entre otras cosas, un descuento obligatorio del 7,5 por ciento en los medicamentos excluidos del sistema de referencia (los patentados) y del 7 por ciento en los productos sanitarios, y adecuará el tamaño de los envases a la duración del tratamiento.

A mediados de febrero, el Ministerio de Sanidad ya había pactado con las comunidades autónomas una serie de medidas de control de costes para ahorrar 1.500 millones de euros en el gasto en medicamentos en 2010.