Ocho personas han resultado heridas en el desalojo por las fuerzas de seguridad israelíes de colonos y ultra-derechistas judíos del interior de una disputada vivienda en la ciudad cisjordana de Hebrón, informó el Canal 10 de televisión.

Tres de ellos han resultado heridos en la cabeza durante el proceso de expulsión, en el que se han producido forcejeos entre los efectivos de seguridad y jóvenes radicales, según muestran las imágenes de televisión.

Medio millar de policías de fronteras y soldados han logrado evacuar a varios colonos, pero un pequeño núcleo duro continúa en la vivienda.

Unas doce familias residen en este edificio de cinco plantas, a las que se habían unido en las últimas semanas varios ultranacionalistas de derecha, hasta sumar más de doscientas personas.

Mientras tanto, jóvenes palestinos lanzan piedras contra la vivienda desde el lado opuesto a la entrada principal, donde se amontonan los policías israelíes.

La actuación de las fuerzas de seguridad llegó después de que el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, se reuniese por la mañana con los dirigentes de los colonos, sin alcanzar un acuerdo para que abandonasen la casa de forma pacífica.

El edificio fue ocupado por colonos judíos en marzo de 2007 sin autorización gubernamental.

La propiedad de la vivienda está en disputa, pero el Tribunal Supremo ordenó el pasado 16 de noviembre su evacuación antes de tres días.

Las autoridades israelíes se habían abstenido hasta la fecha de efectuar la evacuación para aprovechar el "factor sorpresa", según fuentes militares.

Desde entonces, Hebrón se había convertido en escenario, aún más frecuente, de choques entre la población local palestina y colonos judíos apoyados por ultraderechistas israelíes, que dejaron decenas de heridos.

La ciudad -donde judíos y musulmanes veneran las tumbas de los patriarcas bíblicos Abraham, Isaac y Jacob- es la única de Cisjordania con un asentamiento en su interior.