El Ejecutivo de Mariano Rajoy sigue sin comprometerse a prorrogar a partir del próximo de febrero la ayuda de los 400 euros para los parados que hayan agotado todas sus prestaciones, tal y como le han reclamado los sindicatos, el PSOE, que ha lanzado una campaña para pedir su ampliación por 'dignidad' y 'justicia' y las asociaciones de desempleados. Este jueves ha sido la secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, la que ha evitado comprometerse con una afirmación de la que poco puede sacarse en claro: '[El Gobierno] hará lo que tenga que hacer y tomará las decisiones pertinentes'.

Actualmente existen 3.001.078 millones de beneficiarios de prestaciones y 4.848.723  millones de personas apuntadas a los servicios de búsqueda de empleo. Esto significa que más de 1,8 millones de personas en paro no perciben ninguna ayuda. La tasa de cobertura, por tanto, se sitúa en el 64,30%. 

Los Presupuestos del Estado para 2013 recogen un importante recorte del gasto de las políticas de fomento del empleo, entre las que se encuentra la ayuda a los 400 euros para parados de larga duración. Esta prestación, al estar vinculada a la formación y la reinserción, se incluye en el capítulo de políticas activas de empleo y no en el de protección frente al desempleo. El tijeretazo del 34,6% respecto a 2012 en esta partida, una en las que el recorte es más intenso, hace prever que el Gobierno no mantendrá a partir del 15 de febrero de 2013 la ayuda de 400 euros, el conocido Plan Prepara. De hecho, en las cuentas para 2013 no se contempla su mantenimiento más allá de la mitad del segundo mes del próximo año. 

Esta reducción drástica del gasto muestra la crudeza de las medidas aprobadas en el decreto del pasado julio en lo que se refiere a la protección de los desempleados. En aquel momento el Gobierno acordó la reducción de la cuantía de la prestación contributiva a partir del séptimo mes, la eliminación de la subvención a la cotización del trabajador durante la percepción de la prestación, las restricciones a la Renta Activa de Inserción y al subsidio de mayores de 52 años, que pasa a 55 años, así como la supresión del de mayores de 45 años, entre otras medidas. Cuando el pasado mes de agosto, el Consejo de Ministros aprobó la prórroga del Plan Prepara, impuso nuevas condiciones más restrictivas. Además, la ministra de Empleo, Fátima Báñez, dijo en aquel momento que el plan había tenido unos resultados 'decepcionantes' en lo que se refiere a la recualificación de los desempleados y a su inserción en el mercado laboral.

A más parados, menos protección. Esa parece ser la lógica que sigue el Gobierno en la lucha contra el drama de desempleo a pesar de que según los últimos datos dados a conocer este miércoles por el Ministerio de Empleo en España hay 1,7 millones de parados que, a pesar de estar dados de alta en los servicios de empleo, no reciben ningún tipo de prestación. El paro registrado durante el mes de diciembre, es decir, las personas apuntadas en los servicios de búsqueda de empleo, se sitúa en los 4.848.723 millones. Además, la última Encuesta de Población Activa (EPA) –considerada la radiografía más fiable del mercado laboral– determinó que en España hay 5,77 millones de personas que, a pesar de buscarlo, no encuentran empleo.