El Reus Deportiu se convirtió hoy por primera vez en su historia, campeón del mundo de clubes tras superar en la final, disputada en Reus, al FC Barcelona por 1-0 gracias a un "gol de oro" del argentino "Negro" Páez a los diez segundo del inicio de la prórroga.

La final catalana de la segunda edición del Mundial de Clubes fue un encuentro intenso y plagado de ocasiones de peligro, aunque ninguno de los dos equipos fue capaz de marcar un tanto durante los 50 minutos reglamentarios.

El dominio fue para el Barcelona durante gran parte del partido, aunque no supo cómo llegar a Trabal con garantías de éxito, los nervios y la tensión se apoderaron de los dos equipos, y sólo Gil, en dos ocasiones, y Borregán y Panadero, firmaron ocasiones que hubiesen podido mover el marcador.

El equipo barcelonista fue también víctima de los nervios, cuando poco antes de llegar a la prórroga protestó airadamente una posible pena máxima en su área y ello acabó costando la cartulina roja a Carlos López.

En los primeros instantes del tiempo añadido, tan sólo diez segundos, "Negro" Páez, exjugador del Barcelona, resolvió el partido con un potente disparo tras interceptar una bola en el centro de la pista.

En el encuentro por el tercer y cuarto puesto, el derby italiano entre el hasta ahora campeón mundial, el Bassano, se resolvió a favor de éste al imponerse al Valdagno por 4-1.

- Ficha técnica:

1. Reus Deportiu: Trabal, Negro Páez, Gual, Caldú y Gil. También jugaron Garcia, Molet y Sánchez.

0. FC Barcelona: Egurrola, David Páez, Borregán, Ordeig y Panadero. También jugaron López, Teixidó y Masoliver.

Gol: 1-0, min. 50: "Negro" Páez.

Arbitros: Pinto (Portugal) y Fermi (Italia). Mostraron cartulina roja directa a López y azul por acumulación a Panadero.