Esteban Granero, último fichaje del Real Madrid, que regresa al club después de cumplir dos temporadas en el Getafe, ya se entrena como nuevo jugador madridista en la Ciudad Deportiva de Valdebebas.

El canterano merengue por fin ha cumplido uno de sus sueños. Tras dos años en la entidad getafense, y casi toda su juventud en las categorías inferiores del Real Madrid, Granero se entrenó hoy por primera vez como miembro de pleno derecho de la plantilla blanca.

Ya lo hizo en otra ocasión. Fue hace dos veranos en la localidad austríaca de Irding, en la pretemporada y a las órdenes del alemán Bernd Schuster. En aquella ocasión, su futuro estaba fuera del Real Madrid. Al final, fue cedido al Getafe, donde llegó a jugar la final de la Copa del Rey ante el Sevilla y alcanzó los cuartos de final de la Copa de la UEFA.

Algo más de dos años después, y esta vez con Manuel Pellegrini al mando, saltó al césped de la Ciudad Deportiva en la posición vigésimo segunda y acompañado de Miguel Torres, que prácticamente no se separó de él en los quince minutos en los que la prensa tiene derecho para observar las sesiones de trabajo del Real Madrid.

Granero también tuvo su primera charla con Manuel Pellegrini, que durante unos minutos habló con el centrocampista blanco para darle la bienvenida. Después, el jugador del Real Madrid corrió alrededor del campo de la Ciudad Deportiva y completó ejercicios de carrera intensiva. Nunca se separó de Miguel Torres y estuvo cerca de Álvaro Negredo.

Los tres, coincidieron en el Real Madrid Castilla. Sin embargo, parece que sólo dos seguirán en el primer equipo. Granero será uno de ellos. A Negredo se le busca equipo.