El guionista español de la exitosa película "Celda 211", Jorge Guerricaechevarría, asegura que adaptar novelas al cine puede suponer una lucha interna y hasta "ser infiel a uno mismo".

"Si te mantienes fiel a la novela, muchas veces eres infiel a ti mismo", por lo que resulta "difícil adaptar la obra de un autor al que tienes mucho respeto: es mucha presión de hacer las cosas bien", subrayó Guerricaechevarría en entrevista con Efe en San José.

"Por eso las películas basadas en las obras de (Gabriel) García Márquez, por ejemplo, no han sido tan buenas como se esperaba", comentó el guionista, que se encuentra en Costa Rica hasta la próxima semana coincidiendo con el estreno de "Celda 211" en los cines del país.

Desveló que la novela de Francisco Pérez Gandul, en la que se basa "Celda 211", "fue muy complicada de adaptar no sólo por la trama, sino porque estaba muy bien escrita".

"Me gustaba mucho cómo estaba narrada, literariamente", dijo.

El guionista, laureado con el Premio Goya que le otorgó la Academia Española de Cine al mejor guión adaptado por esta película, confesó que le gustaría adaptar al cine alguna de las novelas del escritor estadounidense Paul Auster.

"Aunque realmente sé que es muy difícil transcribir este tipo de literatura al cine", dijo.

Como parte de su visita, el guionista español ofrecerá el próximo lunes una clase magistral de escritura de guiones en la Universidad Veritas de Costa Rica, en la que compartirá algunos aspectos clave sobre adaptación con estudiantes de cine.

"La relación entre guionistas y escritores siempre ha sido de amor-odio porque todos los escritores quieren que se haga una película de sus novelas, pero también odian el resultado", reconoció.

"Celda 211" narra con crudeza el motín de unos presos en una cárcel del sur de España y hace una denuncia social de la situación de las prisiones y sus internos.

Para escribir el guión, Guerricaechevarría y el director de la película, Daniel Monzón, visitaron una cárcel madrileña con el fin de conocer la situación de los que allí se encuentran.

"Visitar la cárcel nos ayudó a no caer en los tópicos de las cárceles norteamericanas de barrotes y hacer la historia verosímil", dijo.

Esta película fue "especialmente complicada" porque "a la vez teníamos un fondo social o de denuncia de un mundo muy particular, pero queríamos que el enfoque fuera muy directo al público, como parte del cine de género", detalló.

En la actualidad, según Guerricaecheverría, "hay demasiada gente en la cárcel y las prisiones están sobrepasadas para la capacidad que tienen de ofrecer una buena reinserción".

"Las condiciones de las prisiones han cambiado mucho, pero todavía existe mucha droga y mucha presión de las bandas", subrayó.

Además, "parece que en España no se nos da bien el cine de género, que es cosa sólo de norteamericanos, pero parece que esta vez ha funcionado", apuntó el guionista.

"Celda 211" fue la gran ganadora de la pasada edición de los Premios Goya, consiguiendo ocho bustos del pintor, entre ellos, el de mejor película, mejor director (Daniel Monzón), mejor actor protagonista (Luis Tosar) y mejor actriz de reparto (Marta Etura).