Público
Público

La guitarra de Manolo Sanlúcar hace vibrar la noche sevillana

EFE

La guitarra del maestro Manolo Sanlúcar hizo vibrar de emoción y de alegría la noche sevillana en la gala inaugural de la XV Bienal de Flamenco de Sevilla, con la que se le ha rendido homenaje.

Las voces agudas del coro "El Misterio de las Voces Búlgaras", integrado por 22 voces femeninas, el jaleo de las alegrías, la austeridad de las soleás, los perfiles de Cristina Hoyos e Israel Galván, el taconeo viril de Juan de Juan, las voces quebradas de Fernando de la Morena y Luis el Zambo y las seis cuerdas de Moraito se sumaron para homenajear al maestro Sanlúcar bajo el cielo de Sevilla.

Algo más de cien artistas, contando a los integrantes de la formación sinfónica Orquesta Joven de Andalucía (OJA), estuvieron todo el rato sobre el escenario mientras que el maestro entraba y salía, vestido de negro y enfocado por un cañón de luz que iluminaba su barba y su cabellera blancas, como si de una aureola se tratara.

Sanlúcar interpretó en solitario "Oración", de su obra "Tauromagia", para luego fundirse con las partituras de la OJA y con las guitarras de David Carmona, Miguel Ángel Cortes, Daniel Méndez u Manuel Morao "Moraito", quien llegó a arrancarse al baile por bulerías.

Cuando Sanlúcar interpretaba "Seducción", de su obra "Medea", Cristina Hoyos hizo acto de presencia envuelta en velos morados, con el rostro también velado, para causar el asombro del público con un baile contenido y con el movimiento de manos que hace único su baile.

La ortodoxia la puso el bailaor Juan de Juan en la soleá "Caminito de Alcalá", interpretada por Sanlúcar -compuesta por el guitarrista en 1974, la pieza más veterana del programa- y con José Valencia al cante, mientras que el talento de Israel Galván, con sus perfiles cubistas de bailaor que domina todos los resortes técnicos del flamenco, volvió a brillar en "Conjuro", también perteneciente a "Medea", e interpretado igualmente por Sanlúcar.

Con un martinete cantado por José Valencia, que estremeció de emoción a los más exigentes, culminó la gala inaugural pese a la insistencia de los miles de asistentes que, con palmas por bulerías, pedían la permanencia sobre las tablas del maestro Sanlúcar, lo que no fue posible por el rigor del programa de la Bienal, que había medido en ochenta minutos la duración del espectáculo.

El coro "El Misterio de las Voces Búlgaras" fue alternando sus intervenciones con esos temas, como si de un diálogo musical y cultural se tratara, del mismo modo que el colorido de sus atavíos tradicionales contrastaba con el negro vestuario de los flamencos, o su gesto hierático con la alegría de la media docena de palmeros que marcaban el ritmo de los cantaores.

"Tu oído es más viejo que tu abuelo", es el título que, extraído de un texto del Premio Nobel de Literatura Elías Canetti, ha sido el elegido para esta gala inaugural, dirigida por Isidro Muñoz, hermano de Manolo Sanlúcar, y quien ha confesado que lo único que perseguía con este montaje era mostrar "la belleza desnuda de la expresión musical".

El espectáculo ha tenido como escenario la Plaza de San Francisco, como decorado la fachada plateresca del Ayuntamiento de Sevilla, y la asistencia ha sido gratuita o por invitación hasta llenar las dos mil sillas dispuestas sobre los adoquines.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias