Público
Público

Hallada en Murcia la evidencia más antigua de la presencia de fuego en Europa

EFE

Fragmentos encontrados en las excavaciones paleoantropológicas de la "Cueva Negra", en el municipio murciano de Caravaca de la Cruz, demuestran la presencia de fuego en esta cueva hace alrededor de 850.000 años, al final del Pleistoceno antiguo, con lo que sería la evidencia más antigua encontrada en Europa de la presencia de fuego en un yacimiento del Paleolítico.

El director de la excavación, Michael Walker, acompañado por el director de Bienes Culturales de la Región, Francisco Jiménez, y por el alcalde de Caravaca de la Cruz, Domingo Aranda, han presentado hoy en rueda de prensa el balance de la campaña de excavaciones de este 2011, destacando el encuentro de restos de cenizas y de huesos calcinados que demuestran la existencia de fuego en la cueva.

Comentó que además fueron hallados restos de sílex que habrían sido moldeados por el calor, y advirtió de que este tipo de actividades podrían ser consideradas ya como "humanas".

El yacimiento de la "Cueva Negra" se encuentra situado en el estrecho del río Quípar, al noroeste de la Región de Murcia, y tiene entre 800.000 y 900.000 años de antigüedad.

En él se han hallado abundantes restos del paleolítico, fósiles de animales y dientes humanos, del "hombre del Heidelburgo", y ahora "se han descubierto huellas de fuego en una capa muy profunda, a 5 metros de la superficie", ha señalado Walker.

Los cambios de color producidos en los restos de huesos de ciervo encontrados "es debido a que éstos han sido sometidos a altas temperaturas, superiores a los 800 grados. Es verosímil pensar que el hombre aprovechaba el fuego producido de forma natural en el exterior para calentarse y cocinar", ha comentado Walker.

Recalcó que los homínidos que habitaban la cueva "tenían un proceso de cognición más desarrollado del que hasta ahora se había querido atribuir a pobladores de hace un millón de años".

Estos homínidos ya podían trabajar un canto rodado y prepararlo para sacar lascas y realizar hachas de mano, y también tenían la capacidad de viajar a una zona determinada para obtener el material idóneo que querían emplear, explicó.

En las 22 expediciones que se han realizado hasta la fecha se ha excavado un área de entre 20 y 25 metros cuadrados, y "al ritmo que excavamos quedan todavía 100 años más" ha concluido Walker.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias