Michael Schumacher podría afrontar una dura prueba en su regreso el próximo año a la Fórmula Uno con el equipo Mercedes a los 41 años, advirtió el jueves su ex rival Damon Hill.

"En algún punto la temporada va a ser muy dura y se va a volver desagradable y podría hacerle recordar por qué se retiró en primer lugar", dijo a la radio de la BBC el británico, quien fue campeón mundial en 1996.

"Tendremos que ver. Una temporada es un tiempo largo y someterá a Michael a una dura prueba de su habilidad", añadió.

Hill, quien compitió con el heptacampeón del mundo a mediados de la década de 1990, dijo que el alemán tiene mucho a su favor, con su amigo Ross Brawn dirigiendo el equipo que ha ganado los dos títulos este año con el nombre Brawn GP.

Además, Max Mosley ha sido reemplazado como jefe de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) por el ex jefe del equipo Ferrari, Jean Todt.

"Van a haber muchos espectadores interesados siguiendo el deporte por eso, porque siempre existió la sospecha de que Michael obtuvo un poco de favoritismo de la FIA", indicó Hill.

"Creo que la FIA va a tener que mantenerse alerta para asegurarse de que no hayan sospechas de eso en la próxima temporada", señaló.

El ex campeón Niki Lauda, quien se retiró en 1979 y luego volvió en 1982 para ganar un tercer título con McLaren en 1984, dijo que los rivales buscarían señales de debilidad en el piloto más exitoso del deporte, que se retiró en 2006.

"Aparte de Gilles Villeneuve (...) se trataba más de que los chicos jóvenes me miraban con recelo y pensaban '¿Este viejo estará a la altura?'", escribió el austríaco en el periódico Guardian sobre su propio regreso.

"Creo que Michael será competitivo pero, más importante que eso, será genial para el deporte", afirmó.

El director comercial de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, estuvo de acuerdo: "Creo que es fantástico para la Fórmula Uno que se convirtiera en un 'chico que regresa'", dijo el británico a la página formula1.com.

"Pero al mismo tiempo creo que es bueno para Michael", agregó.