La industria más "contaminante" bloquea la lucha contra el cambio climático y mueve los hilos entre bastidores para no avanzar en la negociación internacional, según un informe de Greenpeace presentado hoy.

En rueda de prensa, la responsable de cambio climático y energía de Greenpeace, Aida Vila, ha explicado que su organizacion analizará con detalle las relaciones de esta industria con el nuevo Gobierno del PP y estudiará "cómo se juega este partido del lobby político".

En España, también "se puede hablar de intoxicación del mensaje" de la opinión pública a través de la prensa cuando las empresas del sector energético acusan del encarecimiento de la factura de la luz a las energías renovables, pero "se callan" que ellas explotan plantas renovables, poseen centrales nucleares y explotan el carbón.

El informe "¿Qué nos impide avanzar? La presión de la industria contaminante en la negociación climática" apunta a compañías como BASF, ArcelorMittal, BHP, Shell y Koch Industries como "principales culpables" de "condicionar la agenda climática nacional e internacional y dirigirla hacia sus propios beneficios".

Según Aida Vila, "en un mundo globalizado siempre hay conexiones, y cuando se tira del hilo del negacionismo, estés donde estés, detrás se encuentran siempre las mismas compañías".

El informe de Greenpeace "demuestra que las empresas intensivas en carbono obstaculizan a los gobiernos clave para alcanzar un acuerdo climático global, mediante presiones a nivel nacional e internacional", ha concluido.