Bilbao 10 jul (EFE).- Representantes de las principales instituciones vascas y de todos los partidos políticos democráticos se han concentrado hoy frente al Ayuntamiento de Durango (Vizcaya) para condenar el atentado de ETA contra la sede socialista de esta localidad en un acto convocado por el consistorio.

Todas las formaciones así como sindicatos, organizaciones empresariales y asociaciones de víctimas han expresado también su rechazo a la banda terrorista y le han exigido que abandone la violencia.

Todos los grupos del Ayuntamiento de Durango, por su parte, salvo ANV que no ha acudido a la reunión, han aprobado una declaración en la que han expresado su repulsa "enérgica" a una acción terrorista que ha "arrasado" la sede socialista y dañado las casas de "numerosos vecinos".

La bomba, compuesta por tres kilos de cloratita, explosionó sobre las doce de la noche, cuando la Ertzaintza ya había desalojado los inmuebles adyacentes gracias al aviso de un vecino que presenció cómo una persona encapuchada, al parecer un varón, colocaba un paquete junto a la Casa del Pueblo.

No se registró ninguna llamada previa de aviso de colocación del explosivo.

La deflagración, además de importantes daños en la sede socialista y en los inmuebles de los alrededores, causó también una peligrosa fuga de gas, que tuvo que ser atajada por técnicos especializados, lo que demoró el retorno de los vecinos a sus viviendas durante varias horas.

Tras este atentado, el lehendakari, Patxi López, ha advertido a ETA de que "a cada bomba que pongan, menor será el tiempo que quede para su final" y ha querido dejar "muy claro" que el Gobierno Vasco va a aplicar "toda la fuerza del Estado de Derecho y todos los recursos de la ley para acabar con ellos".

El consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, ha insistido en este planteamiento y ha asegurado que el "único camino" que le queda a los terroristas es "dejar definitivamente la violencia", y mientras esto no ocurra usará "todos los medios" a su disposición "para perseguir a los terroristas y detenerlos cuanto antes".

La secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ha asegurado hoy que "por muchas bombas que ponga ETA" y "por muchas amenazas que haga" al Gobierno de Euskadi "no hará mella en la determinación" de los socialistas para acabar con el terrorismo, mientras que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha advertido a ETA que "intentando crear miedo no van a conseguir nada".

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, ha expresado el "apoyo y ánimo" de su partido al PSE/EE y el secretario general de los socialistas vizcaínos, José Antonio Pastor, ha transmitido un "mensaje de tranquilidad" y de lucha contra los terroristas y contra "cualquier espacio de impunidad".

El portavoz del PP en el Parlamento vasco, Leopoldo Barreda, ha considerado necesario "reafirmar la unidad y la voluntad de los demócratas de derrotar a ETA, sin dejar ningún resquicio para que introduzca cuñas entre las fuerzas políticas", y EB-B ha calificado el atentado de "matonismo político".

El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha dicho que este atentado es "coacción inútil a la libertad" y la diputada de UPyD, Rosa Díez, ha insistido en que se utilicen todos los instrumentos del Estado de Derecho en la lucha contra el terrorismo.